El parlamento de Israel aprobó el último 27 de marzo una regulación que indica que, durante la semana de Pésaj, los hospitales y centros médicos no podrán servir comida con levadura. Se trata de una propuesta del partido Judaísmo Unido de la Torá, que avanzó con 48 votos a favor y 43 en contra.
Es una manera de volver mandatorio uno de los preceptos principales de la festividad. La Torá indica que durante esta semana no se puede consumir ningún producto que contenga levadura. Esto limita considerablemente la dieta, porque no se puede comer nada que contenga harina, como el pan, la pizza, o la pasta.
La oposición en la Knéset mostró una fuerte resistencia a la aprobación de la ley. Y en el mismo sentido, Dana Gat y Yoav Glasner, dos militantes en contra del gobierno, están organizando una campaña en contra de la regulación.
El 7 de abril, Gat y Glasner organizarán una “pizza party”, un evento que se realizará frente a un hospital. La curiosa manifestación fue informada a través de las redes sociales. “Estamosa favor de la libertad de -y hacia- la religión”, afirman los manifestantes en su página de Facebook.
Además, Gat y Glasner expresaron que “la ley de jametz hace exactamente lo opuesto. Como protesta, este año tendremos una pizza party en Pésaj en frente de un hospital en el centro”.
El titulo de propiedad de Israel es la biblia,por lo tanto quien se pone en contra traiciona al pais ,es la carta que marca nuestro derecho a estar ahi
Al que no le guste puede ir a cuba ,el vaticano o a hablar con el hamas ,pero es anti sionista les aviso ,la democracia voto a este gobierno
hay mas de 250 paises y uno solo judio
Y después algunos ingenuos dicen que no hay dictadura religiosa.
Viva la religion de la nariz bailarina santa!!!!
Hay que ser muy ignorante al irse contra un presepto de la Tora especialmente en una de las tres festividades mas importantes del Judaísmo. Eso es irse contra D’s , no contra la Knesset
Boker tov, considero que siendo judío se deben respetar al menos las tres festividades más importantes.
Contreras y quejosos no aportan a la tan necesaria unidad de la comunidad.
Shabat Shalom