Celebrando la apertura de la Copa Mundial 2018, la Fuerza de Defensa de Israel (FDI) abrió el archivo que documenta la primera vez que el primer ministro, David Ben Gurión, visitó una cancha para ver el partido realizado entre los equipos de fútbol del ejército de Israel y Francia al conmemorarse el noveno aniversario de la Independencia de Israel el 11 de mayo de 1957.
El documento muestra que, aunque David Ben Gurión, por ese entonces Primer Ministro y Ministro de Defensa, pareció disfrutar de algunos aspectos del partido, no fue una experiencia que se repetiría nuevamente, cuando reflexionó en conversaciones que sostuvo con Shimon Peres, Moshe Dayan y Meir Amit, luego de ver el partido: “Por primera vez en mi vida vi un partido de fútbol, el juego de los franceses fue magnífico, pero nuestro portero estuvo espectacular. Ellos estuvieron bien en los pases, pero fallaron cuando llegaban a la meta”. Nuestro portero fue excepcional, se tiró dos veces para atrapar la pelota”.
Entonces el Jefe de Estado Mayor, Moshe Dayan, respondió bromeando: “Pudo haberlo hecho una vez, pero para el beneficio de la multitud lo hizo dos veces”.
El mayor general Meir Amit del Comando Central le manifestó a Ben-Gurión que una de las razones del éxito del partido Israel venció por 3:1, fue la presencia del Primer Ministro en la cancha, a lo que el mandatario contestó “No volveré a hacerlo otra vez”.
Luego de esto Ben-Gurión aparentemente planteó la idea de establecer un equipo permanente de fútbol en el ejército. “Debería haber un equipo en el ejército para entrenar. Este año no podemos hacerlo debido a los recortes presupuestarios, pero habrá un equipo de treinta personas que entrenarán y vencerán a los rusos”, expresó.
Amit, intentó bajar las expectativas diciendo que los rusos eligen a su equipo de entre 170 millones de personas. La respuesta fue: “nosotros tenemos once millones de judíos, de allí surgió Einstein y ellos no pudieron producir un Einstein de 170 millones… todo depende de la cabeza… la mente controla los músculos”, dijo.
La conversación terminó cuando Dayan le preguntó si había disfrutado del juego, a lo que el Primer Ministro respondió “Fue excepcional. Fui a verlo por que era la FDI y la armada de Francia, de modo contrario no hubiese entregado dos horas de mi tiempo para esto”, aclaró.
¿Cuál es la diferencia entre ir a un partido de fútbol e ir al ver una película? Preguntó Shimon Peres. “Tampoco hago eso”. Respondió David Ben Gurión.
…al conmemorarse el noveno AÑO…
Todavía al europeo que ve un partido de fútbol americano le parece incomprensible, o ya no digamos los partidos de béisbol. Y eso que hasta no hace muchos años, existe una «americanización» desmesurada de los españoles, antes incluso el algo parecido baloncesto americano, con algunas reglas diferentes, era un juego correcalles más preocupado por las marcas o patrocinadores que llevaban los jugadores y por los anuncios de televisión. El fútbol mismo, en España era muy diferente hasta hace bien poco, un país acostumbrado a ser perdedores nada más cruzar la frontera, como mucho rememoraba antiguos títulos del Real Madrid cuando era el equipo de la dictadura fascista, o conformándose con alguna semifinal o copa de menor prestigio. A nivel selección era mucho peor, España tan sólo contaba con una Copa de Europa jugada durante la dictadura fascista de Franco y nada menos que la final fue contra el gran enemigo comunista URSS, ni se sabe lo que pudo pasar, hasta ponían en los cines los goles de la final de otros partidos. Fue en los 90’s que el equipo del Deportivo de la Coruña, un equipo de segunda o tercera categoría, revolucionó a los demás clubs, consiguiendo ligas y llegando lejos en Europa tan sólo utilizando un truco, fichar todos los jugadores extranjeros. Sobre qué fútbol era más divertido, creo que quitando fascismos y patrioterismos, no me cabe duda de que el fútbol más amateur antiguo, por mucha satisfacción, prestigio y dinero que den los profesionales al ganar.
Ben gurion fue un gran estadista y un gran heroe perl en lo que refiere a cultura y ocio dejaba mucho que desead. Con solo recordar que prohibio la llegada a Israel de los Beatles.