La Corte Suprema de Justicia de Israel derogó hoy la ley diseñada para legalizar con carácter retroactivo asentamientos israelíes en Judea y Samaria (Cisjordania), paralizada desde 2017.
La norma, conocida como Ley de Regularización, permitía legalizar residencias construidas en tierras propiedad privada de palestinos en asentamientos en el territorio de Cisjordania.
En su fallo, los jueces argumentaron que la ley es «anticonstitucional» y «busca legalizar retroactivamente actos ilegales perpetrados por una población específica en la región, dañando los derechos de otra».
Además, señalaron, «evidencia una clara preferencia en los intereses de los colonos israelíes sobre los residentes palestinos», quienes afirmaron que deberían tener la condición de «residentes protegidos».
Tras la aprobación de la ley en febrero de 2017, seguida por un rechazo de la comunidad internacional, organizaciones israelíes de defensa de los derechos humanos presentaron ante la Corte Suprema una demanda en su contra, que llevó a que la norma fuese temporalmente suspendida en agosto de ese mismo año.
En caso de haber sido ratificada, la Ley de Regularización habría conducido a la aprobación retroactiva de unas 4.000 viviendas en lo que Israel considera asentamientos ilegales o “outposts”.
En un comunicado, el partido Likud del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, calificó el fallo judicial de «desafortunado», pues la norma era «importante para el futuro de los asentamientos».
Aseguró que esa formación política trabajará para volver a promulgar la ley.
La decisión de la Corte se produce a menos de un mes del plazo previsto por el Gobierno para el comienzo de los procedimientos legales de la anexión de partes del territorio de Cisjordania. EFE y Aurora