Otros tres integrantes de los grupos terrorista Yihad Islámica Palestina (YIP) fueron detenidos.
El establishment de defensa teme una escalada, e incluso el lanzamiento de cohetes desde el Franja de Gaza, tras las amenazas proferidas por la Yihad Islámica y Hamás.
La confrontación transcurrió anoche durante un operativo de arresto en Wadi Burqin, en Samaria (norte de Cisjordania).
De acuerdo con los reportes, decenas de palestinos armados resultaron heridos en el combate.
El cabecilla abatido, Muhammad Qassim Saadi, comandante de la Brigada Jenín, pertenecía al ala militar de la Yihad Islámica Palestina.
El otro terrorista fallecido Naim Zubeidi, era militante de la Brigada de los Mártires de Al Aqsa (ala militar del movimiento Fatah) y sobrino de Zakaria Zubeidi, considerado un “símbolo de la intifada”.
Ambos habían participado en atentados con armas de fuego contra las fuerzas de seguridad.
Zakaria Zubeidi fue en el pasado comandante de las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa, y está cumpliendo actualmente una condena por terrorismo en Israel. En septiembre de 2021, protagonizó una espectacular fuga de la cárcel de Gilboa, a través de un túnel, con otros cinco terroristas presos. Pero fue atrapado cinco días más tarde.
Un cabecilla de Hamás aseguró que la muerte de los dos palestinos abatidos sería vengada.
La operación comenzó alrededor de las 2:00 a.m. cuando una fuerza especial encubierta arribó a la vivienda en la que se encontraba Wasim Faiz, sobre quien pesaba una orden de arresto, y que fue detenido sin oponer resistencia. Las tropas arrestaron además a otros dos palestinos con captura recomendada.
Tras concluir las detenciones, arribaron otros efectivos de la fuerza especial Duvdevan, esta vez con vehículos blindados y combatientes de la unidad de elite Haruv, para asistir al traslado de los detenidos y la retirada de la localidad palestina.
Entonces, terroristas palestinos comenzaron a abrir fuego contra los soldados, que respondieron los ataques.
El blanco principal del operativo de arresto, Wasim Faiz, es sospechoso de planificar un atentado de grandes proporciones contra israelíes y de estar involucrado en la colocación de un coche bomba que explotó cerca de un puesto militar israelí en el área del asentamiento de Mevó Dotan, en Samaria, la semana pasada.
Los otros dos sospechosos detenidos también estarían aparentemente involucrados en actividades terroristas.
Las detenciones fueron llevadas a cabo en el marco de un amplio operativo de las FDI en Judea y Samaria durante el cual nueve sospechosos fueron detenidos y se confiscaron armas de guerra.
El primer ministro saliente Yair Lapid elogió la operación y señaló que los cabecillas abatidos habían planeado y perpetrado atentados en Israel.
“La actividad de las FDI y las fuerzas de seguridad esta noche en Yenín es la continuación directa de nuestra política intransigente en la lucha contra el terrorismo. Los dos [terroristas] de alto rango que fueron abatidos, un comandante de campo de la Yihad Islámica en Yenín y un cabecilla de las Brigadas al Aqsa, planearon y perpetraron ataques terroristas en territorio israelí”, apuntó.
“Precisamente en estos tormentosos días, cuando factores irresponsables están tratando de arrastrar a las FDI a un debate extremista e incitar a los soldados contra sus comandantes, quiero expresar mi agradecimiento a las fuerzas de seguridad”, expresó Lapid, refiriéndose a las críticas de los diputados de ultraderecha por la sanción otorgada a un soldado que se burló de un activista en Hebrón la semana pasada.
“Este es la forma de combatir al terrorismo y de defender a los ciudadanos de Israel”, subrayó.