El ministro de Defensa y primer ministro alternativo, Benny Gantz, manifestó que no cree que el primer ministro, Benjamín Netanyahu, cumpla el acuerdo de rotación según el cual debe traspasarle la jefatura del Ejecutivo en noviembre de 2021.
“Entiendo que no conseguiré la rotación” dijo Gantz, según un reporte del Canal 12, en una reunión a puertas cerradas a los miembros de su partido político, Azul y Blanco, durante una discusión para decidir si permanecen en la coalición o promueven la disolución de la Knéset (Parlamento).
“No lo creeré ni siquiera el día antes de que suceda [la rotación]”, añadió Gantz.
De acuerdo con el Canal 12, el partido Azul y Blanco se partió en dos bandos durante el acalorado debate.
Por un lado, los diputados Asaf Zamir, Miki Haimovich y Ram Shefa, propusieron promover elecciones anticipadas lo antes posible.
En esta misma sintonía, el ministro de Exteriores, Gabi Ashkenazi, identificado con la línea “combativa” y alineado con el titular de Justicia, Avi NissenKorn, declaró: “Vine para ser parte de una alternativa… es por eso que necesitamos disolver la Knéset”.
El bando opuesto, representado por los diputados Hili Tropper, Omer Yankelevich, Pnina Tamano-Shata advierten que “sería un suicidio” ir a elecciones en estos momentos, dado que Azul y Blanco se está hundiendo en las encuestas que proyectan menos de 10 escaños (comparado con los 14 que tienen actualmente en el Parlamento).
Gantz aseveró que está dispuesto a “pagar con su escaño”, pero decidió eventualmente postergar su decisión por dos semanas.