Un palestino intentó entrar al complejo de la Tumba de los Patriarcas en Hebron con un cuchillo y fue detenido.
Efectivos de la policía fronteriza israelí lo identificaron como sospechoso y le apuntaron con sus armas. El palestino soltó entonces un cuchillo que tenía escondido en su ropa.
El palestino, un jóven residente de Hebron, fue interrogado posteriormente por la policía y acorde a los resultados de la investigación inicial, efectivamente se trataba de un intento de atentado terrorista.
Para evitar ser detectado, el palestino había intentado colarse entre un grupo de turistas que estaban en la fila para la revisión de seguridad anterior a la entrada a la Tumba de los Patriarcas. Sin embargo, el palestino levantó las sospechas de los efectivos de la policía que finalmente frustraron el atentado.
«Gracias a la vigilancia de los efectivos se evitó lo que parecía un atentado de apuñalamiento. El sospechoso intentó entrar a la Tumba haciéndose pasar por turista y la profesionalidad y experiencia de los efectivos lograron frustrar sus intenciones», dijo la policía fronteriza en un comunicado.
La Tumba de los Patriarcas es considerado uno de los lugares más sagrados para el judaísmo. Según la tradición, ahí están enterrados los tres patriarcas del pueblo judío – Abraham, Isaac y Jacob – así como las matriarcas, a excepción de Raquel, enterrada en Bethlehem.