Estas elecciones son muy particulares, y no sólo porque sean las cuartas en dos años. Una de las perlitas de estos comicios está en el Aeropuerto Ben Gurión, que por primera vez es un sitio electoral.
Son cuatro las mesas que están en el aeropuerto. Sin embargo, éstas no son para personas vacunadas ni para gente que se va de Israel. Solamente pueden votar aquellas personas que vuelven de afuera y no están inmunizadas.
Estos ciudadanos arriban, y antes de dirigirse a sus casas para hacer la cuarentena obligatoria de quince días, pasan por las urnas. Esta situación es otra de las novedades que impone la realidad pandémica, lo que ha convertido estas elecciones en las más caras y complejas de la historia.