El presidente Reuven Rivlin, recibió el informe anual de 2018 del Consejo Nacional de Israel Consejo Nacional para el Bienestar Infantil. El informe fue presentado por la directora ejecutiva del Consejo, Vered Vindman, quien indicó sus principales conclusiones.
“Los datos muestran lagunas que no podemos aceptar”, dijo Reuven Rivlin. Cuando las brechas en el logro educativo entre judíos y árabes ya son importantes en los primeros años, una edad tan crítica para el desarrollo, significa que los adultos tenemos mucho trabajo por hacer”.
“Israel ha fallado un año más en la defensa de sus hijos”, señaló Vered Windman. “Israel no da prioridad a sus niños, ni siquiera a los niños en riesgo. Frente a las próximas elecciones y con la dura evidencia que muestra el informe, es hora de que los partidos políticos presenten al público un plan detallado para mejorar el estado de niños israelíes”.
“Asegurar la igualdad, la salud y una vida digna para todos los niños de Israel. Cualquiera que se apresure a aplaudir la caída en la tasa de pobreza debe recordar que, casi uno de cada tres niños vive en la pobreza, y que los que viven en la pobreza son aún más pobres. Cualquiera que se sintiera aliviado cuando se reclutó a un puñado de trabajadores sociales adicionales debería recordar que este año también hay más de 340.000 niños en riesgo directo y que, debido al aumento en el número de niños en estado de riesgo, esos trabajadores sociales adicionales apenas tienen algún tipo de impacto” señaló Windman.
Datos seleccionados del informe anual de 2018:
■ 865.860 niños viven bajo la línea de pobreza, casi uno de cada tres niños
■ La pobreza infantil es casi tres veces más frecuente en la población ultraortodoxa
■ Dos de cada tres niños en la población árabe viven bajo la línea de pobreza
■ Alrededor de dos tercios de los estudiantes de la escuela secundaria informaron que habían sido expuestos o presenciados violencia verbal en línea al menos una vez en el último año.
■ Alrededor de una cuarta parte de los estudiantes de escuelas primarias informaron que habían estado expuestos o habían sido testigos de vergüenza, humillación o rechazo en línea al menos una vez en el último año.
El presidente comenzó diciendo: “Como todos los años, quiero resaltar la importancia de los datos en el informe y agradecerles su persistencia en este trabajo detallado año tras año. ¿La pregunta es siempre qué hacemos con estos datos? ¿Cómo lo usamos para asegurarnos de que el presente y el futuro sean mejores para cada niño en Israel? Y cuando digo por cada niño, me refiero a judíos y árabes, ultraortodoxos, religiosos y laicos, musulmanes, beduinos, circasianos, drusos, hijos de inmigrantes económicos e hijos de residentes temporales”.
El presidente agregó: “Los datos indican mejoras en algunas áreas en comparación con años anteriores. Este es el lugar para recordar que detrás de los datos que muestran mejoras se encuentran hombres y mujeres que realizan un servicio público dedicado y profesional, de organizaciones financiadas por el estado y de la sociedad civil, que dedican sus vidas a mejorar la calidad de vida del bienestar. de niños israelíes, y algunos que realmente salvan vidas”.
“Vemos lo lejos donde hemos llegado, dónde nos hemos perdido y hacia dónde debemos enfrentarnos. Las figuras nos ayudan a pintar la imagen del futuro que queremos, y el lugar que queremos asegurar a nuestros hijos, nuestros nietos y las generaciones posteriores”.