La ministra de Justicia, Ayelet Shaked, (del partido Nueva Derecha) se despidió del Ministerio de Justicia, durante un agasajo celebrado en su honor.
Shaked quedó fuera de la Vigesimoprimera Knéset (Parlamento) debido a que su flamante partido no logró superar el umbral mínimo electoral del 3,25% del total de los votos emitidos. La ministra manifestó que retirará por lo pronto de la política, pero insinuó un posible regreso en el futuro.
«Parece que la opinión de los votantes, y también el umbral mínimo, lograron hacer que, después de seis años de intenso trabajo, sea ‘libre’, al menos por un período de tiempo, aunque no voy a prometer cuánto tiempo será».
La ministra agradeció a los empleados del Ministerio de Justicia por ayudarla a procurar su «revolución judicial» – una campaña sin precedentes durante sus cuatro años como titular de la cartera para tratar de reducir el poder de la Corte Suprema de Justicia y modificar el sistema judicial israelí hacia a la derecha con la designación de jueces de dicha tendencia o conservadores.
«Estoy feliz de decir que lo he logrado, con vuestra ayuda, para fijar metas y también para ver el progreso gradual hacia ellas».
El partido Nueva Derecha arañó el umbral mínimo electoral pero le faltaron apenas 1.400 votos para ingresar en el Parlamento. Si lo hubiera superado, habría recibido automáticamente cuatro diputados; pero no lo logró y se quedó con las manos vacías.
Circulaban rumores de que Shaked se afiliaría al partido gobernante Likud, lo que le permitiría quedar al frente del Ministerio de Justicia; pero hoy aclaró que abandonará la política por el momento.