Una niña de cinco años falleció tras caer de una ventana de un noveno piso, en la ciudad costera de Natania.
Los paramédicos, que arribaron a la escena dijeron que su madre la encontró en el estacionamiento del edificio.
El deceso de la criatura fue declarado en la escena.
Aparentemente, la niña cayó de la ventana del lavadero de la vivienda de su familia. Se habría subido a una pila de ropa para alcanzar la ventana.
Según la madre, el hermano y un abuelo de la niña estaban en ese momento en el apartamento.
Orly Singer de la organización B’Terem le dijo al canal de noticias Hadashot que es vital que los padres instalen dispositivos de seguridad en sus casas como barras en la ventana y monitoreen a los niños para prevenir estas tragedias.
También recomendó poner a los muebles lejos de las ventanas.
“La mayoría de las muertes provocadas por caídas desde gran altura ocurren en casa”, apuntó.
De nino recuerdo haber tenido junto a otros familiares y amigos algunos accidentes y por objetos cotidianos o cuando menos te esperas, y por la lógica falta de experiencia, como un asa de una puerta de cocina demasiado afilada como para quedarse colgado, o meter la cabeza en un hueco demasiado justo, o un clavo escondido en un árbol, o riesgos en el mar o picaduras de peces venenosos. Antes puede que la Espana fascista o pueblerina dejase demasiado sueltos a los ninos para que se hiciesen «hombres», ahora se nota quizás demasiado cuidado con los ninos, los padres que busquen encuentran siempre una excusa en una empresa o en un vídeo de internet para comprar o adoptar una nueva medida de protección. Con los ninos nunca se sabe lo que pueden llegar a hacer y cada uno puede ser diferente, si pones muebles lejos de las ventanas igual a alguno se le ocurre arrastrar una silla o cualquier otro objeto para subirse.