Según las estadísticas oficiales de natalidad de 2024 en Israel, a pesar de los conflictos y desafíos económicos, el país ha registrado un aumento en su tasa de natalidad, con 134.000 nacimientos anuales, superando los 131,000 de 2023.
Este crecimiento, impulsado principalmente por familias judías, contrasta con las tendencias en Occidente, donde la natalidad sigue en descenso, en un contexto complejo a nivel nacional, atravesado por la guerra, el servicio militar de reserva, la crisis económica y la inestabilidad política.
Sin embargo, estos factores no han frenado el deseo de muchas familias de tener hijos, de hecho, los expertos sugieren que la compleja realidad del país ha fortalecido la decisión de traer nuevos hijos al mundo.
Históricamente, los períodos de posguerra han estado marcados por los llamados baby booms, y aunque el conflicto en Israel aún no ha terminado, este fenómeno ya comienza a manifestarse.
Israel no solo supera a las naciones occidentales en natalidad, sino también a muchas no occidentales. Mientras en Irán y Turquía la tasa de fertilidad es de 1.7 y 1.9 hijos por mujer, respectivamente, en Israel el promedio se acerca a tres hijos por familia.
