White Bird: A Wonder Story, es una secuela de Wonder, una película estadounidense estrenada en el 2017 que sigue la historia de Auggie Pullman, un niño de 10 años que vive con su madre en Brooklyn y que padece una extraña enfermedad. Auggie estudia en una escuela llamada Beecher Prep, donde conoce a Julian, quien encabeza el rechazo de y el bullying de los compañeros por el aspecto físico que le generó su problema de salud.
En este spin-off, Julian deja la escuela y va a visitar a su abuela, interpretada por Helen Mirren, en París, quien le cuenta su historia, que es la de una niña judía que encuentra refugio gracias a su compañero de clase durante la ocupación nazi en Francia.
A través de sus recuerdos, Sara busca inculcarle valores de empatía y tolerancia. La película explora el impacto del Holocausto en la juventud y resalta cómo la historia puede enseñar a los más jóvenes a ser buenos.
La película, dirigida por Marc Forster, es una adaptación de la novela gráfica de R.J. Palacio. Según Palacio, la autora, esta historia busca que los jóvenes comprendan las lecciones de la historia, a la vez que promueve el diálogo sobre el Holocausto entre una audiencia más amplia y joven.