Unos 80.000 fieles acudieron esta mañana a rezar a la mezquita de Al Aqsa de Jerusalén en el primer viernes de Ramadán, que se desarrolla de momento sin incidentes en la Ciudad Vieja a pesar de la tensión por el guerra en la Franja de Gaza.
El Departamento de Dotaciones Islámicas de Jerusalén ofreció esta cifra.
El comisario general de la Policía de Israel, Kobi Shabtai, afirmó horas antes de que habían entrado unos 40.000 fieles e informó de que no se habían producido disturbios en el recinto, aunque indicó que los agentes siguen en alerta ante el riesgo de ataques, para lo que se han desplegado más de 3.000 efectivos por toda la ciudad.
El grupo terrorista Hamás pidió ayer a los fieles que se atrincheren dentro de la mezquita en las primeras oraciones del viernes, algo que ha ocurrido en años anteriores dando lugar a disturbios, y que este año podría ser particularmente explosivo en el contexto de la guerra.
El primer ministro Benjamín Netanyahu prometió la semana pasada que el número de fieles a los que se les permitiría orar en el Monte del Templo durante la primera semana del Ramadán sería el mismo que en años anteriores y que no se impondrían restricciones a los árabes israelíes ni palestinos residentes en Jerusalén.
De todos modos, el COGAT, el organismo militar a cargo de los asuntos civiles en Judea y Samaria, dictaminó esta semana que el acceso de los residentes palestinos en esa zona se limita a hombres mayores de 55 años, mujeres mayores de 50 años y niños menores de 10 años.
Las tropas israelíes desplegaron un amplio dispositivo de seguridad en los puestos de control de acceso a Jerusalén, especialmente en los de Qalandia y Belén.
Agencias contribuyeron con este artículo de Aurora.
Si se atrnchwran adentro se quedan adentro hasta morir de hambre.
Nadie que conecta acto terrorista debe salir con vida
Espero que los retiren de alli. Que no dejen ingresar a más gente musulmana , es un peligro para Israel, esos musulmanes recibueron instrucciones para atacar a Israel, espero que cierren el acceso.