Ultraortodoxos acusan a Ben Gvir de «poner en peligro vidas judías» con su visita al Monte del Templo de Jerusalén

El periódico Yated Ne’eman, asociado al partido ultraortodoxo Judaísmo Unido de la Torá (JUT), criticó este miércoles en un editorial la visita de ayer del ministro de Seguridad Nacional, el extremista Itamar Ben Gvir, junto a miles de hebreos, al Monte del Templo de Jerusalén, que «pone en peligro las vidas judías».

Por ello, JUT asegura que se está replanteando su permanencia en la coalición de gobierno de Benjamín Netanyahu, de la que es un socio fundamental, al igual que el partido de Ben Gvir, Poder Judío, representante de la extrema derecha sionista religiosa, con concepciones que mezclan política y religión, algo que no gusta a los haredíes.

“Que los judíos suban al Monte del Templo es como arrojar un fósforo a un pozo de petróleo”, se lee en el editorial del periódico. «El Monte del Templo puede convertirse en un volcán que cubra de ceniza todo Oriente Medio».

Aprovechando la conmemoración religiosa del Tisha B’av, entre cánticos, centenares de visitantes judíos -en su mayoría chicos jóvenes, pero también adultos y mujeres- avanzaron ayer por el área conocida como el Monte del Templo dado que allí se levantaron el Primer y Segundo Templo. Se trata, por cierto, del lugar más sagrado para el judaísmo.

El líder de la oposición, el centrista Yair Lapid, tildó de «provocativa» esta visita que, según advirtió, puede derivar «en un incendio y provocar la muerte de ciudadanos israelíes».

Fue la tercera vez que el ministro Gvir acude en fechas clave en los últimos dos meses a este lugar de culto para reivindicar el derecho de los judíos a orar en él, provocando la ira de la población palestina.

Según el ‘statu quo’ vigente desde 1967 -cuando Israel liberó la parte este de Jerusalén, donde se encuentra el Monte del Templo-, el recinto está reservado exclusivamente al culto de musulmanes, mientras que los judíos solo pueden entrar como visitantes. Además, ciertas leyes judías prohíben a sus fieles orar en el lugar más sagrado para el pueblo hebreo, algo solo permitido a algunos rabinos.

El rezo judío se practica en el llamado “Muro de los Lamentos” (o Muro Occidental) -ubicado en uno de los laterales del Monte del Templo-, y así lo aconseja el Gran Rabinato de Israel, aunque en los últimos años, algunos rabinos alineados con el movimiento del sionismo religioso han cambiado esa recomendación y abogan por el rezo donde se levantaron el Primero y Segundo Templo.

Agencias colaboraron con este artículo de Aurora