El pasado jueves se celebró el 103º aniversario de la independencia de Polonia. Durante las marchas a lo largo de todo el país se pudieron ver distintas manifestaciones, y algunas fueron destinadas contra los judíos. Tres personas fueron arrestadas por las autoridades polacas debido a «conductas antisemitas».
En lo que era un día de festejos para los polacos, se pudieron ver diferentes reclamos por parte de la sociedad de ese país. Además de mostrar pancartas y banderas antijudías, también se cantó contra la Unión Europea, y contra algunos sectores del Gobierno Nacional.
Particularmente en la ciudad de Kalisz, donde se detuvo a estos tres manifestantes, se escucharon gritos como «muerte a los judíos». También quemaron copias de los documentos de la época medieval, en los que Polonia ofrecía protección y le otorgaba derechos a la comunidad judía.
Mariusz Kaminski, ministro del interior de Polonia, anunció las detenciones en su cuenta de twitter. Además, expresó en esa red social, que «no hay lugar para el antisemitismo y el odio por motivos de nacionalidad, religión u origen étnico. El estado polaco debe debe demostrar su determinación tras lo ocurrido en Kalisz«.