La Lista Árabe Conjunta (LAC) que nucleaba a partidos árabes anunció el jueves por la noche que se presentaría en las próximas elecciones como dos facciones separadas. Se trata de un movimiento sorpresivo de última hora que podría diluir significativamente la representación árabe en la Knéset después de noviembre.
La decisión de dividirse en listas separadas de Hadash-Ta’al y Balad se produjo solo una hora antes de que las listas finales de los partidos fueran entregadas al Comité Central de Elecciones, y solo un día después de que las tres facciones acordaron presentarse nuevamente como la Lista Conjunta.
A medida que el reloj marcaba la fecha límite de la medianoche para que los partidos presentaran sus listas, Balad se retractó de su decisión de volver a ingresar a la alianza de la LAC, citando una disputa sobre la rotación de uno de sus lugares en la lista con Ta’al y Hadash.
Así, probablemente las dos facciones dividirán los votos de un grupo bastante pequeño de electores árabes. Será una lucha para estos partidos llegar al 3,25% necesario para ingresar diputados al parlamento.
Ya de por sí el voto árabe estaba dividido entre la LAC y el partido islamista Ra’am, el primer partido árabe en participar de un gobierno israelí en toda la historia.
La segura división del voto árabe pone en aprietos a Yair Lapid, ya que ahora la balanza se podría inclinar a favor del bloque pro-Netanyahu, que hasta ahora venía liderando las encuestas pero sin poder lograr una mayoría de 61 escaños, necesarios para conformar gobierno.