El Kremlin negó hoy que se haya tomado una decisión final sobre el repliegue de las tropas rusas de Siria entre informaciones de que Moscú ya ha retirado a cientos de soldados desplegados en las afueras de Damasco.
“A día de hoy, no hay una decisión final al respecto”, dijo Dmitri Peskov, portavoz presidencial, en su rueda de prensa telefónica diaria.
Añadió que Moscú, considerado uno de los grandes perdedores de la caída del régimen de Bashar al Assad, ha establecido contactos con representantes de las fuerzas que “ahora controlan la situación en el país y todo se decidirá en el marco de ese diálogo”.
Representantes del Organismo de la Liberación del Levante (Hayat Tahrir al Sham, HTS, en árabe) confirmaron al diario Financial Times la retirada de al menos 400 soldados rusos de una base de la IV División del Ejército sirio en la localidad de Qudsaya, a las afueras de Damasco.
Además, según informa hoy el diario, Moscú también habría replegado a los militares que se encargaban de la seguridad en la Embajada rusa en la capital siria.
Las nuevas autoridades sirias dieron a los rusos garantías de que el convoy ruso con esas tropas podría desplazarse de manera segura hasta la base aérea de Khmeimim, en la provincia de Latakia.
Además, la fuente subrayó que tienen lugar negociaciones para la evacuación de los soldados rusos de otras zonas del país árabe.
Con todo, negó que Moscú se proponga cerrar sus dos bases militares en Siria, la de Khmeimim y la base naval en el puerto de Tartus, a orillas del Mediterráneo oriental.
Al respecto, la Flota del Norte informó hoy de que la fragata ‘Almirante Gorshkov’ cruzó el estrecho de Gibraltar tras cumplir con sus misiones en el Mediterráneo desde julio pasado.
Esa fragata participó a principios de diciembre frente a las costas sirias en unas maniobras que incluyeron el empleo de misiles hipersónicos.
El Ministerio de Exteriores de Rusia anunció el domingo la retirada de parte de su personal diplomático en Damasco, una semana después del derrocamiento de Al Assad.
Con ese fin, un avión de la Fuerza Aérea despegó de Khmeimim (Latakia) y aterrizó el domingo en un aeródromo militar en las afueras de Moscú.
“El trabajo de la Embajada rusa en Damasco continúa”, precisaba el comunicado.
El viceministro de Exteriores ruso, Mijaíl Bogdánov, aseguró la pasada semana que Moscú había entrado en contacto con representantes de HTS en el hotel Fours Seasons.
“Estos contactos tienen lugar en una atmósfera constructiva y esperamos que los representantes que tienen la responsabilidad por la situación en la ciudad cumplan con todas sus obligaciones”, dijo, en alusión a la necesidad de prevenir “cualquier exceso” en Damasco.
En cuanto a las bases militares rusas en Siria, el diplomático aseguró que “se quedan allí donde están, en territorio sirio”.
Moscú, que dio asilo a Al Assad y a su familia el pasado 8 de diciembre, ha mantenido desde su deposición una postura extremadamente prudente y se ha abstenido de tachar de terroristas a los grupos que participaron en la caída del régimen, con el objetivo de llegar a un acuerdo con las nuevas autoridades sobre el futuro de sus bases.
Desde entonces, Al Assad no ha realizado ninguna comparecencia pública y el presidente ruso, Vladímir Putin, se ha abstenido de comentar la situación en el país árabe. EFE