Regalo de Janucá: un pequeño tesoro de 900 años hallado en Cesárea

4 diciembre, 2018 , ,
Foto: Yaniv Berman, cortesía de Caesarea Development Corporation

En el puerto de Cesárea se descubrió un lote de raras monedas de oro y un zarcillo de oro, escondidos hace 900 años.
Este fascinante descubrimiento se realizó durante un extenso trabajo de excavación y conservación en Cesárea. El trabajo fue patrocinado por la Fundación Edmond de Rothschild, que invierte más de 150 millones de shekels para descubrir los tesoros ocultos en Cesárea y mejorar este sitio, que es el Patrimonio Mundial más importante de Israel.
Los arqueólogos de la Autoridad de Antigüedades de Israel comentaron: “El lote escondido es un testimonio silencioso de uno de los eventos más dramáticos en la historia de Cesárea: la violenta conquista de la ciudad por parte de los Cruzados. Alguien escondió su fortuna con la esperanza de recuperarla, pero nunca regresó”.
Por su parte, Michael Karsenti, CEO de Caesarea Development Corporation comentó que, “a raíz del descubrimiento movilizamos nuestros recursos de inmediato y este raro hallazgo ahora se muestra en el Puerto de Cesárea a partir de hoy y durante la duración de las vacaciones de Janucá”.
Este raro e importante tesoro, una pequeña olla de bronce con 24 monedas de oro y un zarcillo de oro, fue descubierto hace unos días en el Parque Nacional de Cesárea. Se encontró en el área del proyecto de excavación y conservación objeto de la inversión de 150 millones de shekels por parte de la Fundación Edmond de Rothschild, en cooperación con la Corporación de Desarrollo de Cesárea, la Autoridad de Antigüedades de Israel y la Autoridad de Parques y Naturaleza de Israel. El lote se encontró escondido entre dos piedras en el costado de un pozo ubicado en una casa de un barrio que data de los períodos Abbasid y Fatimid, hace unos 900 años.
Según los directores de la excavación, Dr. Peter Gendelman y Mohammed Hatar, de la Autoridad de Antigüedades de Israel, “las monedas encontradas en el escondite que data de finales del siglo XI permiten vincular el tesoro con la conquista Cruzada de la ciudad en el año 1101, uno de los eventos más dramáticos en la historia medieval de la ciudad. Según fuentes escritas contemporáneas la mayoría de los habitantes de Cesárea fueron masacrados por el ejército de Balduino I (1100–1118), monarca del Reino Cruzado de Jerusalén. Es razonable suponer que el dueño del tesoro y su familia perecieron en la masacre o fueron vendidos como esclavos y, por lo tanto, no pudieron recuperar su oro”.
Este importante descubrimiento se hizo cerca de la ubicación de otros dos tesoros del mismo período. El primero, una olla con joyas de oro y plata, descubierta en los años sesenta. El segundo, una colección de recipientes de bronce, que se encontró en la década de 1990. Estos tesoros se muestran actualmente en el Museo de Israel en Jerusalén.
En el centro mismo de las actividades del proyecto de excavación y conservación de Cesárea se encuentra la impresionante fachada del antiguo edificio público central de la ciudad. Este formaba parte de un recinto sagrado construido anteriormente por Herodes, hace más de dos milenios, como homenaje a su patrón romano, el emperador Augusto y a la diosa Roma. El tesoro recién descubierto fue encontrado en esta misma área.
El pozo donde se encontró el tesoro formaba parte de una casa de los barrios fatimí y abasí, construida unos mil años después del reinado de Herodes, debajo de la fachada occidental del templo herodiano. Estos barrios también se extendían hasta el muelle interior del puerto de Cesárea, que para entonces ya se había llenado de sedimentos.
Según el Dr. Robert Kool, experto en monedas de la Autoridad de Antigüedades de Israel, “el hallazgo se compone de una combinación única de monedas que aún no se han visto en Israel y que consta de dos tipos de monedas: 18 dinares fatimíes, bien conocidos en las excavaciones anteriores en Cesárea, donde era la moneda local estándar de la época, y un grupo extremadamente raro de seis monedas imperiales bizantinas de oro. Cinco de estas son cóncavas y pertenecen al reinado del emperador bizantino Michael VII Doukas (1071–1079). Estas monedas no circularon localmente e infieren contactos o posibles relaciones comerciales entre Cesárea y Constantinopla durante ese período. Una o dos de estas monedas de oro equivalían al salario anual de un simple agricultor, por lo que parece que quien lo escondió era, al menos adinerado o involucrado en el comercio”.
Guy Swersky, vicepresidente de la Fundación Edmond de Rothschild, comenta: “Este valioso descubrimiento reafirma la importancia de la decisión del fondo de asignar una suma sin precedentes, más de 150 millones de shekels, para conservar y restaurar la ciudad vieja y el puerto, haciéndolo accesible a cientos de miles de turistas de Israel y de todo el mundo. Este es un proyecto con importancia económica para el desarrollo regional y otra contribución importante de la Fundación Rothschild-Cesárea para el desarrollo del turismo y el empleo en la zona”.
Michael Karsenti, CEO de Caesarea Development Corporation, agrega: “El tesoro se descubrió durante la finalización de un vasto proyecto en el que hemos estado trabajando durante más de dos años. Expone las enormes bóvedas de los puertos de los días cumbres de la gloria de Cesárea. Es simbólico que las moneda de oro fueran descubiertas en la víspera de Janucá. Para nosotros, esto es ciertamente un “Hanukah gelt” [obsequio de Janucá] y un testimonio de cuánto más se halla aún escondido en Cesárea. Invitamos al público a aprovechar los días de Janucá para visitar el sitio con sus hijos y experimentar este fascinante hallazgo”.
Karsenti enfatizó que además de descubrir los tesoros en las bóvedas del templo herodiano el desarrollo del trabajo continúa en el sitio de la antigua sinagoga, cuyo piso de mosaico ha sido parcialmente restaurado.

Moneda de oro en forma convexa “nomisma histamenon” del emperador bizantino Michael VII Doukas (1071-1079 dC) (Foto: Yaniv Berman, cortesía de Caesarea Development Corporation).

Shaul Goldstein, director general de la Autoridad de Parques y Naturaleza comentó: “la antigua Cesárea que se conserva en todo su esplendor en el Parque Nacional de Cesárea nunca deja de sorprender y revela cada vez más su sorprendente y fascinante historia. Durante los siglos posteriores a su fundación, Cesárea se destacó como una ciudad de gran importancia. Incluso hoy, el parque nacional atrae cada año a cientos de miles de visitantes de Israel y de todo el mundo, que disfrutan de una experiencia poderosa y fascinante. Nosotros, junto con las entidades involucradas en la conservación de los tesoros y la riqueza arquitectónica del parque nacional tenemos el deber y el privilegio de preservar el patrimonio de la antigua Cesárea en beneficio de todo el público y para las futuras generaciones”.
Israel Hasson, director de la Autoridad de Antigüedades de Israel, asegura “desde su fundación hace 2030 años y durante los períodos que siguieron Cesárea fue una ciudad portuaria vibrante. Su importancia y riqueza arquitectónica la convirtieron en una de las ciudades más importantes de Roma y Bizancio. Las excavaciones arqueológicas realizadas en el sitio en nombre de la Autoridad de Antigüedades de Israel, que prosiguen a décadas de excavaciones anteriores, revelan muchos restos desde el tiempo de Herodes hasta el período de los Cruzados. Además de las vastas excavaciones en el Parque Nacional Cesárea y el puerto, se están realizando amplias actividades de conservación, restauración y desarrollo. El proyecto es, de hecho, uno de los proyectos de conservación más grandes e importantes de Israel hasta la fecha.
Cesárea Marítima, foto aérea del antiguo puerto. (Foto: Yaakov Shimdov, Autoridad de Antigüedades de Israel).

Compartir
Subscribirse
Notificarme de
guest
0 Comentarios
Inline Feedbacks
Ver todos los comentarios