Unos de los servicios principales del Hotel Boutique The Vera es ofrecer a sus huéspedes los secretos de Tel Aviv: recomendaciones sobre atracciones «secretas» en los barrios vecindarios.
Algunas ideas turísticas son: visitar el centelleante bulevar Rothschild, donde se halla el nuevo “Sendero de la Independencia” (Shvil Haatzmaut) , un recorrido muy interesante que se puede realizar en forma individual con mapas y explicaciones en varios idiomas o el histórico y pintoresco Neve Tzedek donde se halla el Centro Suzanne Dellal con espectáculos inolvidables de danza. Pero lo más interesante en estos días es la visita al “Shuk Levinsky” en el barrio Florentín..
Florentín es un antiguo barrio de Tel Aviv, que aún no ha sido descubierto en gran escala, pero merece ser visitado especialmente por la noche aunque sea tarde. Florentín tiene una población muy mezclada y aunque se caracteriza tradicionalmente por su pobreza y por la transitoriedad sin embargo, es cada vez más “joven” por la forma en que se ha desarrollado su ubicación en la noche telavivense. Es un barrio que está cambiando, muy lejos de las márgenes de riqueza, y más cerca de los temas de la creación, más bien en el estilo de un centro artístico y de la cultura alternativa. Es el barrio que simboliza el sur de Tel Aviv, un área fascinante para caminar por sus callecitas, en contraste con la moderna Tel Aviv, que domina el resto de esta ciudad y es por lo tanto cada vez más popular por su vida nocturna. Se lo conoce como el Soho de Tel Aviv.
El Shuk Levinsky de Tel Aviv que el “Condé Nast Traveler” lo ha incluido en su lista de “Las mejores tiendas de antigüedades y mercados de pulgas, según los profesionales”, publicada en septiembre 2018. Tal como lo explican en este prestigioso medio, “En todo el mundo, desde Tel Aviv hasta Sicilia, se encuentran locales indescriptibles, mercados y almacenes desmoronados llenos de tesoros”, para descubrirlos se dirigieron a las personas que visitan estos lugares para ganarse la vida: decoradores de interiores, estilistas y diseñadores para que revelaran sus lugares secretos y nuestro mercado Levinsky resultó ser uno de estos sitios privilegiados.
El Shuk Levinsky es una joya cultural en el corazón del moderno barrio de Florentín en el sur de Tel Aviv. Puede que no sea la primera parada para un turista típico en Tel Aviv, pero la combinación de especias exóticas y personalidad única podría atraer a cualquiera a este mercado (o Shuk). Un lugar muy popular para los locales, es uno de los mejores lugares para comprar especias en Tel Aviv.
Son solo cinco cuadras pero los visitantes las recorren como si fuera a través de una vasta historia culinaria. Los inmigrantes judíos de Grecia comenzaron a establecerse en las cercanías de Florentín alrededor de la década de 1930, se abrieron puestos de especias, tiendas y restaurantes, que ofrecen cocina y especias de los Balcanes. El área vio una afluencia de inmigrantes iraníes después de la creación del estado de Israel. Trajeron sus propios sabores con ellos, agregando tiendas y comida persa y el mercado continuo expandiéndose.
Hoy en día, los visitantes pueden encontrar un mercado con una colorida variedad de sabores y aromas de todo el mundo. El Shuk Levinsky tiene todo para comer, beber, degustar y saborear, desde arenques salados polacos hasta “burekas” turcas y desde aceitunas curadas sirias hasta sándwiches tunecinos. Hay panaderías, restaurantes y tiendas que venden artículos de frutas secas y nueces, artículos para el hogar y materiales, y mucho más. Todo ello en un ambiente único y especial. Ya sea que esté aquí para comprar o experimentar, se pueden realizar tours guiados por profesionales de la gastronomía, que combinan la aventura culinaria con el contexto histórico mientras se detiene en los restaurantes modernos y tradicionales a lo largo del camino.
Paseos culinarios: Shuk Levinsky y Florentín
El Shuk Levinsky
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