El director y creador multidisciplinar Yehezkel Lazarov debuta por primera vez en la Ópera cautivando al público con una de las obras favoritas del repertorio mundial. Por Chiquita Levov
En estos días se está presentando en la Opera Israelí una nueva producción de «Orfeo y Eurídice», del compositor Christoph Willibald Gluck dirigida por Yehezkel Lazarov quien logra ofrecer al público una experiencia teatral, musical y visual única algo para recordar mucho tiempo. Lazarov llega por primera vez a la ópera israelí con su singular lenguaje teatral y lleva al escenario la historia del artista que llora la muerte de su amada y está dispuesto a emprender el peligroso viaje para recuperarla. El director de orquesta italiano Matteo Beltrami llega por primera vez para ponerse al frente de la Orquesta de la Ópera, la Sinfónica Israelí Rishon LeZion. La pieza está acompañada por videos e imágenes colaboración de Lazarov y Ran Slavin. El Coro de la Opera Israelí dirigido por Itay Berckovitch. Se presenta hasta el 19.4, en el Hogar de la Opera de Tel Aviv. Más datos: https://www.israel-opera.co.il/eng/
La ópera se basa en la historia mitológica del prodigioso poeta Orfeo que pierde a su esposa Eurídice, llora y en su desesperación, decide seguir a su amada hasta el reino de la muerte. Lazarov utiliza su singular lenguaje teatral para contar la historia de un gran amor que lleva a Orfeo a un osado viaje al mundo de los muertos, para intentar convencer al dios del inframundo de que la devuelva a la vida. La condición es que no debe mirar a la cara de su esposa muerta antes de llegar a la vida. Orfeo llega al cielo, pero es incapaz de soportar el sufrimiento y gira la cabeza hacia ella y la vuelve a perder. Sin duda un gran éxito para el director a pesar de que este es un nuevo género en la carrera de Lazarov, famoso actor, director, creador, coreógrafo y diseñador. Quien eligió usar el blanco y el negro como símbolos, y envolver toda la historia con fragmentos de videoarte creados por el famoso artista israelí Ran Slavin, que agregan mucho a la producción.
Lazarov declaró que su concepción escénica entrelaza lo personal, lo conceptual y lo político-social. En lo conceptual, la ópera aborda el poder curativo de la música. La otra capa, social y política, se refiere al anhelo y al viaje que somos capaces de hacer para sacar a nuestros seres queridos de los sótanos del infierno, tema muy actual en la sociedad israelí. Declara: “Durante el proceso creativo fue importante para mí sentirme identificado con los sentimientos de los personajes y no simplemente como mitológicos. La música de Gluck es hermosa y conmovedora y más allá de eso, el público se entregará a los hermosos sonidos emitidos por el voces de cantantes”. El rol de Orfeo es interpretado exitosamente por el contratenor Nicholas Tamagna (EE. UU.). La estrella israelí Alla Vasilevitsky ofrece una hermosísima Eurídice.