Ya hace tiempo, se presentó un proyecto de ley, que fue aprobado preliminarmente por el Comité Ministerial de Legislación, que buscaba mantener los subsidios a guarderías para niños cuyos padres ultraortodoxos han evitado su reclutamiento en las Fuerzas de Defensa de Israel, desafiando una sentencia de la Corte Suprema que declaró ilegal esa ayuda estatal.
Originalmente, dentro de la coalición de gobierno del primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, se habían conseguido los votos necesarios para aprobar el proyecto impulsadao por el partido ultraortodoxo Judaísmo Unido de la Torá (UTJ).
La propuesta ha sido rechazada por diversos sectores de la coalición, y finalmente la oposición de al menos nueve de sus legisladores, incluyendo miembros del partido Likud.
El lunes, Yuli Edelstein, presidente del Comité de Asuntos Exteriores y Defensa y miembro del Likud, declaró públicamente que no respaldará el proyecto de ley. Ante la posibilidad de que el proyecto no alcance el apoyo suficiente, circuló la información de que UTJ ha advertido que boicoteará otras votaciones clave respaldadas por la coalición.