Un equipo de investigadores de la Universidad Hebrea de Jerusalén ha desarrollado un innovador análisis de sangre capaz de detectar la enfermedad de Parkinson antes de que aparezcan los primeros síntomas.
El descubrimiento fue liderado por la profesora Hermona Soreq, del Centro Edmond y Lily Safra para Ciencias del Cerebro y del Instituto Alexander Silberman de Ciencias de la Vida. La investigación, publicada en la revista científica Nature Aging, representa una esperanza para millones de personas.
Según Sorew: “Este hallazgo es un gran paso adelante en la forma en que entendemos y detectamos el Parkinson. Ahora tenemos un examen de sangre sencillo y mínimamente invasivo, lo que permite detectar la enfermedad mucho antes de que se manifiesten daños cerebrales irreversibles”.
El avance se logró gracias al estudio de fragmentos de ARN de transferencia (tRFs), un tipo de material genético que había sido ignorado en investigaciones previas sobre Parkinson. El doctorando Nimrod Madrer, bajo la supervisión de Soreq, lideró el trabajo experimental junto a investigadores del Centro Médico Shaare Zedek y de universidades británicas.
A partir de las muestras de sangre de 60 pacientes con Parkinson en fases tempranas y 60 personas sanas, los investigadores compararon la proporción entre los fragmentos RGTTCRA y los mitocondriales.
Mediante un algoritmo de aprendizaje automático, el test consiguió diferenciar entre individuos enfermos y sanos con una precisión del 86%, superando ampliamente los diagnósticos actuales.