Las familias del teniente Hadar Goldin y el sargento Oron Shaul, que cayeron en combate en la guerra de 2014, en Gaza, y cuyos cuerpos están en manos de Hamas, objetaron una solicitud de los palestinos para que se les permita a las fuerzas de socorro internacional que ayuden en la búsqueda de cinco terroristas, que se cree están atrapados en un túnel fronterizo, que el Ejército de Defensa de Israel explotó días atrás.
«Esperamos que el Gobierno israelí no se atreva a acceder a la solicitud de Hamas, mientras no devuelvan a Oron», manifestó la familia Shaul tras informes de que la Cruz Roja estaba presionando a Israel para que le permita ayudar en el esfuerzo de búsqueda. «Oron fue secuestrado en un túnel cavado por los combatientes de Hamas, y está retenido en Gaza por ellos desde hace tres años, mientras se niegan a permitir que la Cruz Roja verifique su situación».
La familia Goldin pidió al primer ministro, Biniamín Netanyahu, que condicione explícitamente la aprobación de cualquier pedido humanitario al regreso de Hadar y Oron a Israel.
«Todo gesto humanitario israelí hacia Hamas debe estar condicionado al regreso de nuestros hijos a casa», aseveró la familia Goldin. «Si el Gobierno israelí accede a Hamas, sería una injusticia moral y una debilidad diplomática. No puede ser que el Gobierno siga accediendo a los caprichos humanitarios de Hamas, mientras los soldados del Ejército de Defensa de Israel permanecen cautivos».
Tanto Shaul como Goldin, que cayeron en Gaza durante la Operación Borde Protector en 2014, fueron declarados por el rabino jefe del Ejército de Defensa de Israel como soldados caídos cuyo lugar de entierro se desconoce.
Siete terroristas murieron y once resultaron heridos en la explosión del túnel, entre ellos altos comandantes de Jihad Islámica y Hamas. Entre los muertos había también comandos de Hamas que entraron en el túnel tras su explosión en un esfuerzo por extraer a los heridos.
Tras las declaraciones de las familias de los soldados caídos, el Coordinador de Actividades Gubernamentales en los Territorios (COGAT), general Yoav Mordechai, le subrayó a Jacques De Maio, jefe de la delegación del Comité Internacional de la Cruz Roja, que Israel «no permitirá los esfuerzos de búsqueda en la zona de seguridad de la Franja de Gaza, si no hay progreso en la cuestión de los prisioneros de guerra y los desaparecidos en acción israelíes».
Mientras tanto, las Brigadas Saraya Al Quds, el ala militar del grupo terrorista Jihad Islámica Palestina (PIJ), publicaron un video amenazando a Israel tras la destrucción del túnel terrorista.
El video comienza con un documental de los funerales de varios de los terroristas de la organización muertos en la explosión del túnel, y continúa con imágenes que muestran a los integrantes de la organización colocando misiles en las bocas de los túneles y observando las tropas del Ejército de Defensa de Israel en la zona de la valla de seguridad fronteriza.
Al final del video, una leyenda escrita en hebreo dice: «El tiempo se está agotando».