Con un ritmo moderado de aumento de precios y una recuperación gradual en el sector de la construcción, el mercado inmobiliario israelí ofrece señales de estabilidad.
Sin embargo, factores como la alta inflación, las tasas de interés y la recuperación del empleo en la construcción seguirán moldeando las tendencias en los próximos meses, luego de más de un año del inicio del conflicto con Hamás, que tuvo efectos negativos en el sector.
Tras los impactos de la guerra con Hamas y las limitaciones en el sector de la construcción, los datos más recientes indican precios de las viviendas experimentaron un leve descenso entre agosto y septiembre, mientras que las actividades de compraventa y alquiler mantienen un ritmo constante.
Según el Buró Central de Estadísticas, en el tercer trimestre de 2024, el precio promedio de un apartamento fue de 2,242,900 de NIS, lo que representa una caída del 3.7% respecto al trimestre anterior. Las regiones con mayores descensos fueron el distrito central y Jerusalén, mientras que en Haifa y el norte los precios aumentaron.
Los principales factores que aportan a la estabilización son el sector de la construcción, que comienza a recuperarse y la tasa de interés, que se mantiene alta en un 4.5%.