El asesor y yerno del presidente de EEUU, Donald Trump, Jared Kushner, y el enviado de la Casa Blanca para Oriente Medio, Jason Greenblatt, se reunieron con el rey de Jordania, Abdallah II, quien les reiteró que Jerusalén oriental debe ser la capital de un futuro Estado palestino independiente.
El monarca transmitió a los dos estadounidenses la necesidad de relanzar el proceso de paz entre palestinos e israelíes «en base a la solución de los dos Estados y las resoluciones internacionales relevantes» en ese sentido, según un comunicado de la Casa Real.
Asimismo, Abdallah II señaló que «Estados Unidos tiene un papel importante que jugar» en ese proceso de paz, que se encuentra estancado desde 2014.
Además, el rey dijo que el estatus de Jerusalén debe ser decidido en el marco de un acuerdo definitivo porque «representa la clave para alcanzar la paz en la región» de Oriente Medio.
También prometió que Jordania seguirá desempeñando su papel de custodio de los santos lugares musulmanes y cristianos en Jerusalén oriental, según la nota.
La visita a Ammán de los dos representantes de Trump se produce un día después de que el primer ministro, Biniamín Netanyahu, se reuniera con Abdallah II en la capital jordana para abordar el plan de paz impulsado por Washington.
Sin embargo, la parte palestina ha rechazado a EEUU como único intermediario en el proceso desde que el presidente estadounidense reconociera Jerusalén como capital de Israel en diciembre último y anunciara el traslado de su embajada a la Ciudad Santa, que se hizo efectiva el pasado 14 de mayo.
La Administración de Trump no ha fijado aún una fecha para presentar su plan de paz y los negociadores Kushner y Greenblatt aseguran que quieren escuchar las diferentes posturas para ultimar el documento. EFE y Aurora