Las primeras grullas de la temporada de migración de otoño llegaron ayer al lago Hula al norte israelí. Esto dio inicio a la temporada en la que deberían arribar entre 80 mil y 90 mil de estas aves.
De ellas, entre 30 mil y 40 mil deberían pasar el invierno en el país y no se irían hasta principios o mediados de marzo. El resto se detiene a descansar antes de volar rumbo a África.
Debido a su gran número, las grullas en el parque del lago Hula son un éxito particular entre los visitantes. El pasado diciembre, sin embargo, fueron las principales víctimas de un brote de gripe aviar que, en un primer momento, se propagó de los gallineros a las aves silvestres.
Se estima que una de cada cinco murió por esta enfermedad, en dicho lago, donde las aves se reunían en concentraciones porque estaban alimentándose para mantenerse lejos de los campos de los granjeros. Un portavoz del KKL-JNF, que administra el sitio, dijo que la Autoridad de Parques y Naturaleza de Israel tomaría una decisión sobre la alimentación de las grullas este año a mediados de diciembre.
El brote de gripe aviar de 2021 también mató a 500 pelícanos que llegaron hacia el final de la temporada de migración de estas aves. Se habían detenido en Beit She’an al sur del mar de Galilea.