Las amenazas existenciales a los judíos en Francia

29 abril, 2021 , , ,
Manifestación en homenage a Sarah Halimi - Place du Trocadero - París - Foto: Jonathan Rebboah/REUTERS

El caso francés es un paradigma de la imperfección de las leyes en cuando al trato que le da la justicia al antisemitismo reinante en el país galo. Los casos de agresiones, asaltos, robos, saqueos, palizas, violaciones y asesinatos son escrupulosamente silenciados en su inmensa mayoría por los medios de comunicación que temen ser tachados de racistas ¿Por qué los medios de comunicación se inhiben o disimulan bajo pequeños titulares los ataques antisemitas? La inmensa mayoría de las agresiones de carácter antisemita son ejecutadas por las descontroladas masas de población inmigrante islamista que soporta Francia.

El caso de Sarah Halimi, una médica judía jubilada de 65 años que fue asaltada, torturada, vilmente asesinada y lanzada por la ventana de un tercer piso por su vecino Kobili Traoré, autor confeso, aun no remueve lo suficiente la conciencia de Francia. El presidente Emmanuel Macron pide un cambio en la legislación, pero eso ni es suficiente ni resolverá el problema en el futuro. El caso que mencionamos ocurrió en el año 2017 y hasta ahora todo ha sido un despropósito al punto de que la justicia francesa ha desestimado enjuiciar al asesino confeso, atención a este dato, por considerar que estaba bajo el consumo de estupefacientes.

En estos días del mes de abril del 2021 cuando se ha conocido el fallo, nunca mejor dicho el fallo, las manifestaciones se están sucediendo en contra de una sentencia que no considera que fue un crimen de antisemitismo. En otras palabras, si asesinas a un judío en Francia no serás enjuiciado y serás libre de seguir asesinando a otros siempre que hayas consumido algún estupefaciente. Aunque grites el nombre de un cierto dios, mencionando su grandeza, no te preocupes que serás considerado no enjuiciable ¿Qué está pasando en Francia y en Europa?

La relación inmigrante islamista y antisemitismo está más que probada, pero es políticamente incorrecto decirlo, publicarlo o simplemente opinar acerca del gravísimo problema que representa para el conjunto de Europa la inmigración islamista. El relato de enfrentarse a la realidad no le gusta a esta Europa que está adormecida creyendo que puede vivir de los réditos de la gloria pasada acumulada. La vieja Europa está agonizando contagiada por la pandemia del antisemitismo, pero se la sigue tratando con una simple pastilla contra el resfriado social.

La aniquilación de los judíos, por muy fuerte que suene, es un sueño anhelado por millones y millones de musulmanes que ven al Estado de Israel, y los judíos, como un símbolo de humillación para su idiosincrasia islamizada. Un espíritu que se ha importado a Europa por medio de una inmigración selectiva que está ocupando espacios de libertad, igualdad y fraternidad convirtiéndolos en zonas de exclusión de europeos dentro de la misma Europa. En muchas zonas de Francia, y otras partes de Europa, la policía no puede ejercer su labor y autoridad pues los islamistas no les dejan entrar. Una realidad que se quiere dramáticamente ocultar.

El complejo de culpabilidad que arrastra toda Europa hace que cierre los ojos a la realidad de la invasión islámica en forma de inmigrantes que según ellos solo quieren una vida mejor en la mencionada Europa. Claro que quieren una vida mejor, todos queremos una vida mejor, la diferencia es que esta nueva inmigración quiere una vida mejor, pero sin judíos.

Compartir

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.