La cifra representa un 40% más de participación que en el último año, reveló el presidente del comité de organización, Perez Trabelsi.
Según el responsable, la capacidad hotelera de esta pequeña isla, situada a 600 kilómetros de la capital, está al completo mientras los operativos de seguridad y logística están preparados para la llegada de los primeros asistentes. Un evento religioso, pero también turístico, que atrae a visitantes de todo el mundo, especialmente de la diáspora tunecina residente en Francia e Italia.
La Ghriba es uno de los templo más antiguos del mundo, con 2.600 años de historia, y el pasado año las autoridades tunecinas solicitaron su inscripción en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO junto a una treintena de sitios y monumentos arqueológicos del país.
Según la tradición, la peregrinación se celebra cada año en el día 33 de la Pascua judía y rememora el final de la epidemia de peste que podría haber terminado con la vida de 24.000 seguidores del Rabí Akiva (50-135 de la era común), uno de los principales eruditos judíos.
El ritual estrella de esta festividad es encender velas y escribir deseos en huevos duros, que luego esconden en una cavidad del muro de la sinagoga a la espera de que se cumplan.
En 2022 La Ghriba abrió sus puertas tras dos años de ausencia debido a la pandemia de la COVID y en 2002 sufrió una atentado yihadista, reivindicado por el grupo Al Qaeda, que acabó con la vida de 21 fieles.EFE y Aurora
La sinagoga tunecina de La Ghriba acoge a 7.000 peregrinos
![Interior de la sinagoga La Ghriba en Djerba, Túnez Foto: Issam Barhoumi Wikimedia Commons CC BY-SA 4.0](https://aurora-israel.co.il/wp-content/uploads/2023/05/Synagogue_de_la_Ghriba_Djerba_11-1.jpg)