La ONU advirtió este jueves al nuevo Gobierno israelí acordado por Benjamín Netanyahu y Benny Gantz que sus planes para anexionar partes de Cisjordania (Judea y Samaria) serían una «seria violación de la ley internacional», un «golpe devastador para la solución de dos estados» y «cerrarían la puerta» a las negociaciones con los palestinos.
«La peligrosa perspectiva de anexión por parte de Israel de partes de la Cisjordania ocupada es una creciente amenaza», aseguró el enviado de Naciones Unidas para Oriente Medio, Nickolay Mladenov, en una comparecencia ante el Consejo de Seguridad, reunido por videoconferencia.
Netanyahu y Gantz, que el lunes sellaron un acuerdo de gobierno para terminar con el bloqueo político en Israel, acordaron entre otras cosas la posibilidad de proceder a la anexión de parte de esos territorios a partir de julio.
Mladenov subrayó que, de concretarse, el movimiento amenazaría «los esfuerzos para avanzar la paz en la región» y recordó que la Autoridad Palestina ha amenazado con cancelar la aplicación de todos los acuerdos bilaterales si Israel no detiene su plan.
En la reunión, el representante palestino ante la ONU, Riyad Mansur, insistió en que la anexión no se aceptará como si nada y reclamó a la comunidad internacional que se sume a los palestinos en su respuesta.
La respuesta al coronavirus en la región también ocupó buena parte de las intervenciones, con el enviado de la ONU destacando la coordinación entre israelíes y palestinos para actuar ante la enfermedad con la colaboración de Naciones Unidas.
La cuestión, sin embargo, provocó una acalorada discusión entre Mansur y el embajador israelí, Danny Danon, con el palestino acusando a Israel de continuar con sus “agresiones” en medio de la pandemia y el israelí acusándole de despreciar los esfuerzos que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) está haciendo para asistir a la población. EFE y Aurora