El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, ordenó este martes confiscar fondos de la Autoridad Palestina (AP) destinados a terroristas liberados y a sus familiares que sean residentes en Israel así como a los que cumplen condena en cárceles israelíes, según informó en un comunicado.
“No permitiremos que la Autoridad Palestina siga recompensando a los terroristas por asesinar y dañar a ciudadanos israelíes”, dijo Katz.
Tras el anuncio, las fuerzas israelíes allanaron las casas de los sujetos a esta orden (los delitos incluyen intento de secuestro de soldados, preparación y contrabando de explosivos) confiscando dinero en efectivo y bienes.
Además, el Ministerio de Defensa también declaró que al menos 470 millones de shékels de los fondos destinados a ser transferidos a la AP fueron bloqueados y en su lugar se transferirán “para compensar a las víctimas del terrorismo y sus familias”.
“El dinero sangriento que la Autoridad Palestina paga a los terroristas es combustible para el terrorismo. El Estado de Israel está en una guerra integral contra el terrorismo: en el campo de batalla, en el ámbito económico y en todos los ámbitos donde sea necesario”, subrayó el titular de Defensa.
El presidente de la AP, Mahmud Abbas, aprobó a principios de mes la reestructuración de la forma en la que el Gobierno palestino paga a las familias de los presos encarcelados, neutralizados o heridos por Israel.
A partir de ahora, estos fondos están custodiados por la “Institución Palestina de Empoderamiento Económico”, bajo supervisión internacional, y compiten con otras prestaciones sociales que puedan recibir esas mismas familias, a fin de hacerlo de forma más equitativa.
Así, los familiares de los presos palestinos solo recibirán estas ayudas en caso de tener necesidades económicas acuciantes y no en virtud de los delitos que hayan cometido o del tiempo que permanezcan en la cárcel, según detalló la agencia WAFA.