Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) anunciaron ayer, jueves, que un oficial cayó en los combates en el sur del Líbano.
El soldado fallecido fue identificado como el capitán Ben Zion Falach, de 21 años, que servía en el 202º Batallón de la Brigada de Paracaidistas.
Falach era oriundo del moshav (aldea agrícola cooperativa) Nitzanei Oz, en el centro de Israel.
De esta manera, asciende a nueve la cifra de combatientes caídos desde el comienzo de la operación terrestre en el sur del Líbano, la madrugada del martes.
Las FDI informaron el miércoles de la muerte otros ocho soldados en combates con efectivos del grupo terrorista chií Hezbollah, desde el comienzo de la campaña terrestre, los primeros muertos en territorio libanés desde la guerra de 2006.
Tras la muerte de los primeros ocho soldados, el primer ministro, Benjamín Netanyahu, señaló que el país se encuentra «en medio de una dura guerra contra el eje del mal de Irán» y subrayó que regresará a sus casas a los ciudadanos israelíes que fueron evacuados tanto del norte de Israel, fronterizo con el Líbano, como de las zonas fronterizas con Gaza.
El jefe del Estado Mayor de las Fuerzas de Defensa de Israel, teniente general Herzi Halevi, que visitó los centros de mando de dos divisiones en la frontera libanesa, que operan en territorio libanés, aseguró que no permitirá que Hezbollah se vuelva a establecer en esos lugares en el futuro y advirtió con continuar atacando al grupo terrorista chií, armado y financiado por Irán.
«No permitiremos que Hezbollah se establezca en estos lugares en el futuro. Los golpes que le estamos asestando a Hezbollah continuarán», aseveró.
Agencias colaboraron con este artículo de Aurora
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