Yair Lapid, Naftalí Bennett y Mansour Abbas firman el acuerdo de la Coalición en junio 2021.

Nada está dicho hasta que la Knéset vote, pero con un acuerdo cerrado, Israel se encamina a tener un gobierno histórico. Histórico no solamente porque no está Benjamín Netanyahu o por su cantidad récord de mujeres al poder, sino también por la diversidad del gabinete.

Arranquemos por Naftalí Bennett. El líder de Yamina será el primer primer ministro en la rotación con Yair Lapid. Así, se convertirá en el primer jefe de gobierno israelí en usar kipá. Nunca antes un religioso había ocupado Beit Aghion.

Contando la participación de Ra’am, que todo indica que brindará apoyo externo, serán ocho los miembros árabes de la coalición. Uno de ellos será ministro: Issawi Frej, de Meretz, y futuro encargado de cooperación regional. 

También habrá representación etíope, de la mano de Pnina Tamano-Shata, futura ministra de absorción. De la lista que circula, se desprende que un tercio de los ministros serán de origen mizrají, es decir, descendientes de las comunidades de Medio Oriente.

El ministerio de Salud quedará en manos de Nitzan Horowitz, periodista abiertamente homosexual.

La diversidad ideológica también es notable. Nunca antes un gobierno había juntado tantas extracciones políticas distintas. Habrá derecha secular con Gideon Sa’ar y Avigdor Liberman, y también religiosa con Bennett y Ayelet Shaked. El centro estará representado con Lapid y Benny Gantz. Los partidos Meretz y Avodá representarán a la izquierda. Finalmente, y en un hecho histórico, un partido islamista, Ra’am, será de la partida.

Más allá de cuestiones ideológicas, lo que no se le puede negar al gobierno del cambio es que plasma en su conformación la diversidad que existe en Israel.

 

Compartir
Subscribirse
Notificarme de
guest

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

0 Comentarios
Inline Feedbacks
Ver todos los comentarios