El presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, afirmó que el pueblo judío hizo que el mundo «se arrodillara» frente a ellos.
El discurso se dio en el marco del Día de la Independencia de ese país. La fecha recuerda la liberación de Minsk por parte del Ejército Rojo en 1944.
«Los judíos lograron hacer que el mundo entero se arrodillara ante ellos y nadie se atreverá a levantar la voz y negar el Holocausto», dijo Lukashenko. Además, se refirió como «holocausto bielorruso» a los crímenes perpetrados por la Alemania Nazi en su ocupación de Bielorrusia.
Franak Viacorka, asesor de la opositora Sviatlana Tsikhanouskaya, crítico en duros términos al mandatario bielorruso. «Lukashenko está demostrando su descortesía, mentiras patológicas y antisemitismo manifiesto. Este hombre está tratando de alimentar en Bielorrusia todo el mal contra el que el mundo está luchando en el siglo XXI”, aseveró en diálogo con el canal Kan, .
El sábado, Reuven Rivlin había enviado una carta de felicitaciones a Bielorrusia con motivo de su independencia. El presidente israelí fue uno de los pocos líderes occidentales en felicitar al polémico dirigente.
En la misiva, Rivlin recordó a los líderes israelíes que vivieron en Bielorrusia. Entre ellos, nombró a Jaim Weizmann, Simón Peres, Isaac Shamir y Menajem Béguin.
Lukashenko se encuentra en el poder desde la caída del bloque soviético. En los últimos años, grandes protestas estallaron en el país de 9,5 millones de habitantes contra el autoritarismo y la falta de libertades políticas.
Señalado por Estados Unidos y la Unión Europea, el mandatario se aferra a su cargo. Para eso, no duda en perseguir opositores y periodistas.