Pablo Sklarevich
El primer ministro, Biniamín Netanyahu, se ha empecinado en llevar el proyecto de ley de enrolamiento militar para los judíos ultra ortodoxos a votación al último debate de las sesiones de verano de la Knéset (Parlamento). Todo esto, a pesar de la conocida oposición del viceministro de Salud, Yaakov Litzman, del partido Iahadut Hatorá (Judaísmo de la Torá), que advirtió mil veces que si la Corte Suprema de Justicia no posterga o rechaza el proyecto de ley, presentará su renuncia al Gobierno.
Fuentes cercanas al ultra ortodoxo Litzman explicaron que el viceministro no amenaza ni al primer ministro ni a la Corte, sino que obedece exclusivamente las órdenes del Consejo de los Sabios de la Torá, que sostiene que hay que enmendar el proyecto de ley antes del fin del período de sesiones.
El primer ministro recalcó que la aprobación de la “Ley de enrolamiento”, tanto como la “Ley de la nacionalidad”, está en la cima de las prioridades de su coalición.
Sin embargo, en los pasillos del Parlamento no son pocos los que creen que Netanyahu está en realidad empujando a los ultra ortodoxos a fracturar la coalición y por lo tanto a llevar al país a nuevas elecciones.
Seguramente, el primer ministro ha leído las encuestas. En el último sondeo de Panels Politics, para el sitio Web de noticias Walla, el partido gobernante Likud parece trepar a 35 diputados.
Con la mitad de esa cifra, le sigue el partido Yesh Atid, del diputado Yair Lapid, con 17 escaños. La alianza Campo Sionista, del laborista Avi Gabbay, lo escolta de lejos a millones de años luz con apenas once escaños.
Después de las festividades de septiembre prosiguen las investigaciones judiciales contra él y su esposa, y… ¿quién sabe qué dirán entonces las encuestas?
Además, el diario Haaretz sugiere que Netanyahu prefiere que el plan de paz de Trump sea presentado después de los comicios en Israel para evitar mezclar las cuestiones diplomáticas con la campaña electoral, que seguramente el titular del Ejecutivo enfocará sobre un único tema: la seguridad.
cuentan…no se si es cierto…que en la epoca en que bibi era viceministro de asuntos exteriores en los años 80….cometio una infidelidad contra su señora…un funcionario del ministerio se entero y se presento en el despacho de bibi pidiendole dinero a cambio de su silencio….bibi..imperturbable se levanto…agarro al chantagista por la oreja…lo saco del despacho..
y propulso con una tremenda patada en el trasero fuera del ministerio a este vil sujeto…y despues se fue a su casa a confesarse con su mujer y a pedir perdon que por lo visto le fue concedido…….bueno.este es bibi…
si israel limitara al norte con el gran ducado de luxemburgo…al este con la republica de san marino y al sur con el principado de monaco….pues ya habrian jubilado a bibi…pero como al norte israel limita con iran.assad.hezbollah y al sur con hamas y el estado islamico en el sinai….y como los unicos vecinos aliados…son la monarquia jordana y el ejercito egipcio….
pues los israelies prefieren una mano fuerte y alguien que sepa darles una sensacion de seguridad…la izquierda israeli todavia continua contra toda logica presa del sueño de oslo que no es un sueño si no una pesadilla y no es ni puede ser una alternativa digna de confianza,
SÍ, Sklarevich, SÍ, ASÍ ES !!!
BIBI BUSCA ADELANTAR LAS ELECCIONES, Y DEJAR UNA VEZ MAS, OJALÁ QUE PARA SIEMPRE, A LA ZURDA (ANTI) ISRAELÍ FUERA.
OTRA TAREA IMPORTANTE ES SACAR A LOS EXTORSIONADORES Y CHANTAJISTAS PARTIDOS ULTRA-ORTODOXOS DEL PRÓXIMO GOBIERNO