La compañía “Adamá”, de los bailarines y coreógrafos Liat Dror y Nir Ben Gal, se une a las celebraciones del festival “Darom Adom” que se lleva a cabo en estos días hasta el 29 de febrero en todo el norte del Néguev y este año en su triunfal 15a. edición, ofrece una gran variedad de actividades con el telón de fondo de las anémonas (Kalaniot) que cubrirán los espacios verdes entre Nahal Shikmá y el arroyo Besor.
En este marco se presenta la pieza titulada “The roots of Pain” de su creación. Es una interpretación nueva y actualizada de 3 trabajos anteriores de Liat y Nir: “Two-Bedroom Apartment”, ”Inta Omri” y “Dance of Nothing.” Las tres coreografías de Dror y Ben Gal, se presentan en un evento que incluye además Talleres “Contacto” para el público, un encuentro de Danza Libre con DJ y el espectáculo mencionado. En el Centro de Movimiento Adamá, en Sderot. El 7 y 14 de febrero.
“Adamá” es una institución fundada por Liat y Nir, hogar de la compañía y un estudio que imparte varios talleres y durante muchos años estuvo ubicado en el umbral del desierto, en Mitzpé Ramón. Ahora se halla en su nuevo hogar en Sderot, donde la lucha, el baile, la compasión y el amor se entrelazan constantemente con la realidad cotidiana, reciben una visión más madura y más conciliadora. Las mismas preguntas con la misma orientación que continúa envolviendo y brindando comodidad, con o sin respuestas.
Los creadores declaran que “A través de este espectáculo se tratan temas de amor, relaciones, luchas de poder, la definición e identidad de cada individuo. Las tres surgen desde una perspectiva en la que las luchas internas con uno mismo, entre el yo y el otro, las luchas entre pueblos y culturas son la misma cosa. Como el tamaño de la lucha, también es el amor”.
Liat Dror nos dice: “El trabajo coreográfico comenzó aprendiendo a “amasar la masa” y en el proceso de hacerlo esta crece sola. Su suavidad y flexibilidad dependen de una combinación de habilidad y relajación. Esta pieza va acompañada de grabaciones de música en vivo interpretadas en espectáculos pasados donde los sonidos orgánicos del habla, la risa de la audiencia, los chillidos en el piso y la respiración se mezclan. La misma conexión entre la interpretación final y el sonido de la poesía hebrea, del aliento y de los pasos, le da a la banda de sonido la secuencia de capas de tiempo”.
Fotos: Gal Dor