dom. Abr 20th, 2025

Emoción y gratitud al angel de Budapest, el Schindler español

Ángel Sanz-Briz recibe un premio junto a la cantante hoandesa Lenny Khur en la Embajada de España en La Haya Foto: Archivo Nacional de Holanda / Anefo CC0

Emoción y gratitud fue lo que sintió George Flesh cuando descubrió el nombre de su padre en la lista de sobrevivientes del Holocausto salvados por Ángel Sanz-Briz que difundió el Centro Sefarad-Israel.

Sanz-Briz, conocido como el angel de Budapest, “hizo posible mi existencia y la de mi familia, un regalo que no olvidaré”, comenta este estadounidense sobre el diplomático español que salvó la vida a más de 5.000 judíos.

El Centro Sefarad-Israel de Madrid, una entidad que sirve de puente entre España y el mundo judío, publicó en 2021 la lista de judíos a los que Sanz-Briz (1910-1980) salvó de los nazis en Hungría, en busca de sobrevivientes o sus descendientes.

Una historia de coraje

“Me enteré de la iniciativa del Centro Sefarad-Israel para encontrar descendientes de judíos que recibieron papeles de protección españoles en Budapest durante la Segunda Guerra Mundial a través de artículos del Jerusalem Post y el Jewish News Syndicate, publicaciones en línea que leo con frecuencia”, relata este médico retirado, de 78 años.

Laszlo Flesh, su padre, nunca le contó su historia, cómo se salvó de la Shoá, el Holocausto en hebreo.

Fue su madre Hedy quien le reveló que su padre logró escapar del trabajo forzado al que el Ejército húngaro sometía a judíos y llegó a Budapest sin documentos de identidad, pero “de alguna manera, consiguió la documentación española”.

“Un día estaba en la calle, quizás buscando comida, y lo detuvieron unos oficiales alemanes”, pero su padre, “que tuvo mucho coraje, empezó a amenazar a los alemanes, les mostró su documento español e insistió en que llamaran al cónsul español”, rememora.

“De hecho, hicieron la llamada. El consulado español envió un coche y se llevó a mi padre, probablemente a una de las casas de seguridad españolas alquiladas por Sanz-Briz para albergar judíos”, añade.

Después junto a su esposa, que también sobrevivió a la persecución nazi, salieron para Estados Unidos en 1948.

Acto de bondad humana

“Su nombre figuraba en la lista, con su año de nacimiento y su ciudad natal en Hungría. Fue un momento de profunda emoción para mí, de gratitud por un acto de bondad humana y a Dios por salvar a mi padre cuando millones de judíos fueron asesinados”, confiesa sobre lo que sintió al verlo en el listado del centro.

Sus padres eran de una zona de Hungría donde apenas el 10 por ciento de los judíos se salvó.

Flesh ha podido conocer en España junto a su esposa a tres de los hijos de Sanz-Briz: Ángela, Adela y Pilar.

“El personal del Centro Sefard-Israel, especialmente María de Miguel, hizo que nuestra visita a Madrid fuera conmovedora y emocionante”, sentencia.

“El Centro Sefarad-Israel me ha abierto una ventana a una parte esencial de mi historia familiar y de mi propia trayectoria vital. Siento un gran agradecimiento por todos sus esfuerzos por fortalecer el vínculo entre España y el pueblo de Israel”, a donde viaja con frecuencia, pues tiene allí a sus hijos y nietos.

La lista de Sanz-Briz, con los judíos a los que dio un pasaporte español haciéndolos pasar por sefardíes, recuerda a la de Oskar Schindler, el empresario alemán que salvó a más de mil judíos polacos, ambos declarados por Israel Justos entre las Naciones. EFE

3 thoughts on “Emoción y gratitud al angel de Budapest, el Schindler español”
  1. El acto humanitario de Sanz-Briz nada tuvo que ver con el régimen franquista, aunque los fascistas españoles se centraron en tratar de exterminar a los masones, o también a no pocos demócratas o “rojos”, pero también eran muy antisemitas, Franco y los filonazis falangistas especialmente, o eso dicen unos pocos historiadores objetivos que aún se pueden encontrar en España. Por ejemplo, aunque totalmente desconocido por los españoles, durante la Guerra de Independencia de Israel, Franco envió falangistas, armas, municiones, y aviones caza y bombarderos que le vendió la Alemania nazi, naturalmente los envió a los países árabes, a cambio buscaba ganarse el voto de los países musulmanes para ingresar en la ONU, una apuesta segura de los fascistas españoles ya que nadie daba un duro por la victoria judía. O querían petróleo, debido al aislamiento internacional por haber apoyado a la Alemania nazi, y por la política económica autárquica, o racista y casi comunista, de los sumamente ineptos falangistas filonazis y de Franco, España estaba en la ruina, los fascistas de las clases bajas pasaban hambre, ya no digamos las familias de los republicanos, o por ejemplo tenían que “inventar” arcaicas transformaciones de los coches de combustible a batería o a cáscaras de patata. Pero luego Franco encontró su salvación en el comienzo de la Guerra Fría, con los pactos militares con Estados Unidos en 1953 a cambio de bases militares y de esconder a los falangistas del público internacional. También la España fascista se transformó en aliada de Israel, fue cuando Franco ordenó una campaña de imagen internacional para hacerse llamar el Salvador de los judíos, incluso ordenó a Sanz-Briz que dijera a los judíos que actuó por orden de Franco.

  2. Esta transformación de los fascistas españoles fue más bien cara a la galería, de puertas para adentro no cambió tanto el antisemitismo ni tampoco la antimasonería, si bien Franco se vio obligado a permitir en las bases americanas que hubiera las únicas logias masónicas en territorio español, o también tuvo que contenerse con el antisemitismo en público, según ha contado algún historiador, durante un encuentro con unos emisarios del gobierno norteamericano no se le ocurrió nada mejor que soltar uno de sus habituales comentarios antisemitas, entonces uno de los americanos tuvo que pararle diciendo que él era judío.

    Los falangistas más filonazis también salieron del gobierno, cambiados por los ministros capitalistas de la secta ultracatólica del Opus Dei, aunque los dejaron algunas tareas, como una asignatura de patriotismo o lavado de cerebro fascista, obligatoria en todos los colegios españoles al menos hasta 1975 con la llegada de la democracia actual. Aunque al parecer en puestos como dirigir la televisión pública duraron unos años más, y en 1979 se vieron obligados a emitir la famosa serie de TV Holocausto, una miniserie norteamericana que ganó varios premios y que emitieron muchos países europeos, con esta serie fue la primera vez que una gran mayoría de europeos vieron lo que realmente fue el Holocausto judío, aunque fuese una serie de ficción dónde apenas se ven unos contados crímenes de los muchos que cometieron los nazis. En España se vio en horario nocturno de máxima audiencia en el único canal de TV que tenían los españoles en esos años, aparte de que la televisión era el gran entretenimiento, por no decir el único, de la mayoría de los españoles, además emitieron la serie seguida todos los días durante una semana. Pero lo que parecía algo insólito que llamó mucho la atención, supuestamente para asegurarse de que a todos los españoles les quedaba claro lo malos que fueron los nazis con los judíos, sin embargo según un reciente artículo de opinión de un periodista fue así porque los fascistas que aun dirigían la televisión pública quisieron quitarse el problema lo antes posible, quizás al emitir la serie tan rápido pensaron impedir que hubiera algún debate crítico con la ayuda de sus redes clientelares, falangistas o con los curas, aunque hasta para un niño las imágenes que se veían en la serie dejaban poco por debatir.

  3. En la España franquista se transformaron coches de gasolina al gasógeno con leña o csrbón, no creo que usasen cáscara de patata, y empresas españolas fabricaron coches hasta de pedales y muchos modelos miniatura de dos plazas con un aspecto como los de feria con motores de baja cilindrada, conocidos por biscuter.

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