Según un dictamen del lunes del Tribunal Superior de Justicia de Israel, el gobierno nacional tiene tiempo hasta el 24 de marzo para responder ante el tribunal y brindar explcaciones sobre la resolución gubernamental de junio de 2023, que ordenaba que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) no reclutaran a los estudiantes de ieshivá por nueve meses.
La decisión de la corte se da luego de recibir muchas peticiones para que se investigara esta decisión política del gobierno de Israel. A priori, el tribunal emitió una orden provisorio que anula la exención automática del servicio militar para las personas que no sean reclutadas antes de los 20 años, regulación que afecta principalmente a los haredim.
Al mismo tiempo, un grupo de cientos de manifestantes se reunieron en la plaza Agranat pidiendo una mayor igualdad en las políticas de reclutamiento del servicio militar obligatorio nacional.
El abogado Eliad Shraga, que encabeza el Movimiento por un Gobierno de Calidad y fue uno de los oradores ante el tribunal, expresó que “en un momento en el que el duelo se cierne sobre tantos hogares, cuando hay tantas personas heridas, esta discriminación clama al cielo. No podemos seguir obsesionándonos con esto, especialmente en un momento en el que las FDI están pidiendo mano de obra”.
Algún día los israelíes, tendrán que entender que es inconcebible que ésta, y situaciones similares, persistan en ese estado, y lo contraproducente que es, la permanencia de las mismas. Y éso, sin contar con que ese sector parasitario y nefasto, cada vez gana más poder en la sociedad (a favor de los irritantes privilegios de los que goza), y que nada bueno augura para el futuro de la nación judía, que lento pero sin pausa, va camino a ser otro Irán.