Un fuerte terremoto de magnitud 6,1 en la escala de Richter sacudió este martes la isla griega de Kárpatos y se notó en Creta, donde en las últimas semanas la gran actividad sísmica ha provocado graves daños.
Según anunció el Instituto Geodinámico del Observatorio de Atenas, el epicentro del seísmo, que tuvo lugar a las 08.32 hora local (05.32 GMT), se situó en el mar a 127 kilómetros al sureste de Kárpatos, en el Dodecaneso, y a una profundidad de 58,5 kilómetros.
De momento no hay información sobre heridos ni daños materiales, aunque el temblor se sintió también en las turísticas islas de Santorini, en las Cícladas, y Rodas, en el Dodecaneso.
Precisamente, hace una semana, Creta sufrió un terremoto de magnitud 6,3 que durante 30 segundos dañó muchos edificios, poco después de que otro de magnitud 5,8 dejase a cientos de familias en la calle y se cobrase la vida de un hombre, que falleció por el colapso del tejado de una iglesia.
A lo largo de Israel varias personas manifestaron haber percibido los temblores y objetos sacudiéndose en sus viviendas.
El Dr. Ran Nof, investigador del Geological Survery of Israel (GSI) le dijo al sitio web del diario Yediot Aharonot, que el seísmo se sintió en Jerusalén y Lod; pero no se recibieron reportes de daños.
“En Israel, sentimos que los temblores se dispersan desde el epicentro, que estuvo en el Mediterráneo. Cuanto más alejados del centro, más disminuye la intensidad del terremoto”, apuntó el investigador.
Nof explicó que los temblores no son inusuales en el país y que según las estadísticas históricas espera que ocurra un terremoto de gran intensidad en esta área aproximadamente cada 100 años.
Un estudio publicado en el año 2020 por la Universidad de Tel Aviv predice que un fuerte terremoto sacudirá a Israel en un futuro cercano, dado que el último terremoto de alta intensidad ocurrió en 1927. EFE y Aurora