El Parlamento (Knéset) aprobó hoy por mayoría el acuerdo de establecimiento de relaciones diplomáticas con Bahréin firmado el mes pasado, con la única oposición de los diputados de la Lista Unida árabe.
«Este acuerdo de paz es una gran grúa para nuestra economía y todos los ciudadanos de Israel lo disfrutarán», celebró el primer ministro, Benjamín Netanyahu, tras recibir el apoyo de 62 diputados de los 120 del Parlamento.
El texto volverá ahora al Gabinete de Gobierno que previsiblemente lo ratificará por unanimidad, siguiendo el mismo trámite que pasó el acuerdo con Emiratos Árabes Unidos (EAU) el mes pasado, los dos impulsados por la Administración estadounidense de Donald Trump.
Esta aprobación formal resulta una medida meramente burocrática, ya que los pactos de cooperación, visitas oficiales y conexiones aéreas entre Israel y los dos países árabes han avanzado a gran velocidad desde la presentación de los conocidos como Acuerdos de Abraham en la Casa Blanca el pasado 15 de septiembre.
EAU y Bahréin son los primeros países árabes en establecer relaciones con el Estado judío después de Egipto (en 1979) y Jordania (en 1994), y ahora Israel avanza también hacia la normalización con Sudán con quien, a diferencia de los estados del Golfo Pérsico, mantuvo durante décadas una profunda enemistad.
Durante la larga sesión parlamentaria de hoy, Netanyahu agradeció a Trump el impulso de estos acercamiento y confió en que la senda se mantendrá con la nueva Administración de EE.UU. que liderará el demócrata Joan Biden, quien se impuso en las elecciones del 3 de noviembre.
«Le agradezco (a Trump) su postura firme contra Irán, su apoyo constante en la ONU, el fortalecimiento de los lazos de seguridad y los acuerdos de paz. Doy la bienvenida al hecho de que mi amigo Joe Biden y con él, Kamela Harris, también hayan acogido con satisfacción estos acuerdos», dijo.
Israel espera la visita del ministro de Exteriores bahreiní, Abdulatif bin Rashid al Zayani, la próxima semana. EFE