El 1 de julio era la fecha estipulada para el regreso de los turistas particulares a Israel. Si bien ya estaba permitido el ingreso a los visitantes que llegaban a Tel Aviv en grupos, aún no se había autorizado la entrada al país de forma individual.
Luego de la exitosa campaña de vacunación que derivó en la eliminación de las restricciones casi en su totalidad, parecía que la normalidad estaba cada vez más cerca. Sin embargo, los nuevos brotes de COVID-19 debido a la variante Delta del virus, volvieron a encender las alarmas.
Es por eso que la ministra del Interior, Ayelet Shaked, se reunirá con altos funcionarios para discutir si se permitirá que los ciudadanos extranjeros vacunados puedan entrar a Israel a partir del 1 de julio tal como estaba previsto, según informó la emisora Kan.
Ante el aumento de casos de coronavirus, la reapertura de las fronteras de Israel a los turistas vacunados podría posponerse. Es que si bien podría decirse que Israel tenía la pandemia bajo control, el crecimiento de la positividad en los últimos días se atribuyó a los ciudadanos israelíes que llegaron desde el exterior.
El primer ministro Naftali Bennett, brindó en la tarde de ayer una conferencia de prensa en la que instó a los israelíes a evitar los viajes internacionales que no sean esenciales.