En un paso que hizo sin aviso previo y tomó a muchos por sorpresa, la diputada Idit Silman, del partido religioso nacionalista Yamina -que lidera el primer ministro Bennett- anunció que retiraba su apoyo a la coalición y que trabajaría para la formación de un nuevo gobierno.
Esto debilita a Bennett y a sus socios de Ejecutivo en un contexto de tensión en la región tras varios ataques, lo que provocó fuertes críticas por parte de la oposición de partidos de derecha. A su vez, el ex primer ministro Benjamín Netanyahu, ahora líder del bloque opositor, estaría maniobrando para tumbar la coalición y recabar apoyos para formar un gobierno alternativo, según los reportes.
En el momento actual, la pérdida de apoyo de Silman implica que el Gobierno de Bennett se queda con 60 escaños y solo podrá aprobar leyes dependiendo también del apoyo de partidos de la oposición, una situación que dificultará aún más su capacidad de gobernar.
Netanyahu felicitó hoy a Silman, consideró su paso «valiente» e instó a otros diputados de derecha que integran el actual Gobierno a pasarse a su bando, donde aseguró que «serán recibidos con total respeto y los brazos abiertos».
La actual coalición asumió el poder en junio y consiguió destronar a Netanyahu tras 12 años consecutivos como primer ministro.
Está integrada por una amplia amalgama de ocho partidos que forman parte de todo el arco ideológico, desde la derecha, centro, izquierda e incluso una formación islamista.
Según los reportes, Silman podría unirse ahora al partido de Netanyahu, el Likud, si se le otorga una posición destacada y se le garantiza el cargo de ministra de Salud en un futuro Gobierno.
Asimismo, el movimiento dado por Silman podría abrir la puerta a otros miembros de perfil de derecha de la actual coalición de Gobierno a seguir sus pasos. Esto podría decantar la balanza a favor del bloque opositor de Netanyahu para darle una mayoría necesaria con la que buscar la formación de un Ejecutivo alternativo.
La crisis de Gobierno estalla después de que Israel estuviera sumido estos últimos años en un escenario de alta inestabilidad política, teniendo que celebrar cuatro elecciones generales en solo dos años, entre 2019 y 2021. EFE y Aurora
Me parece que la actitud de IDIT SILMAN es MUY CORRUPTA, MUY PUERCA, MUY SUCIA. Se retira de la coalición, con EL «CÍVICO» ESPÍRITU DE QUE LA NOMBREN MINISTRA DE SALUD. Eso, se llama ser una VIEJA PERRA. UNA VIEJA CORRUPTA.
Y encima de eso, se la da de religiosa ? Es UNA PAYASA esta mujer. Una persona observante, que no disfrazada, es una persona con acciones dignas. NO OPORTUNISTAS COMO ESTA MUJER.
Lo que mal comienza, mal acaba. Este gobierno es un mamarracho desde todo punto de vista y la lógica indicaba que no iba a poder sostenerse mucho tiempo.
ESTA ES……..