El enviado especial de Estados Unidos para Oriente Medio, Steve Witkoff, insistió en su objetivo de incluir el potente programa iraní de misiles balísticos en las negociaciones que mantiene para un nuevo acuerdo nuclear con la República Islámica.
En una entrevista con la cadena Fox News, Witkoff apuntó que el objetivo de Estados Unidos es limitar el programa nuclear iraní a fines civiles y que, por tanto, Teherán no necesita enriquecer uranio más allá del 3,67%.
Pero también apuntó la necesidad de que haya una “verificación del armamento, que incluye los misiles y el tipo de misiles que tienen almacenados”.
“Estamos aquí para ver si podemos resolver esta situación mediante la diplomacia y el diálogo. La primera reunión fue positiva, constructiva y convincente”, declaró Witkoff, quien el sábado participó en unas primeras conversaciones con Irán que se desarrollaron con la mediación de diplomáticos de Omán.
Teherán siempre ha insistido que su programa de misiles es un asunto separado, que no es objeto de discusión, y la Guardia Revolucionaria Iraní afirmó este martes que la capacidad defensiva del país es una línea roja.
Así lo declaró el general de brigada Ali Mohammad Naeini en un acto con motivo del aniversario del ataque con 300 misiles y drones de Irán contra Israel del 13 de abril de 2024, que pese a su espectacularidad apenas causó daños.
El líder supremo de Irán, Ali Jameneí, afirmó este martes que los primeros pasos de las conversaciones con Estados Unidos sobre el programa nuclear iraní estuvieron “bien”.
Durante su primer mandato (2017-2021), Trump retiró a Estados Unidos del acuerdo firmado en 2015 entre Irán y las potencias mundiales, que establecía límites estrictos a las actividades nucleares de Teherán a cambio de un alivio de las sanciones.
Desde entonces, Irán enriquece uranio muy por encima de lo permitido en el extinto acuerdo y ya posee 274 kilos enriquecidos al 60% de pureza, cercano al uso militar del 90%, según el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA).