El viernes pasado, se llevó a cabo un evento en la Oficina del Fiscal del Distrito de Nueva York en la que tuvo lugar la devolución de una obra de Egon Schiele a sus legitimos herederos.
Timothy Rief, descendiente de Fritz Grünbaum, recibió un cuadro más del pintor del expresionismo austriaco.
Se trata del cuadro número once que recibe la familia, luego de décadas de luchas en los tribunales por la herencia legítima del intérprete de cabaret judío vienés Fritz Grünbaum.
Reif expresó que “en uno de los momentos más oscuros de la historia del mundo, todo terminó”, y agregó que “hay un centro de gravedad moral, hay un sentido ético, religioso y hay generosidad que surge de algo que fue fundamentalmente malvado. Que esto ocurra es increíble”.
En este caso, se trataba de un dibujo titulado “Mujer desnuda sentada, vista de frente”, que hasta ahora pertenecía al economista judío Gustav Fritz Papanek, quien desconocida el origen de la obra.
La familia de Papanek afirmó que consideraba que devolver el dibujo era lo correcto: “Somos afortunados de que nuestra familia… pudo disfrutar viendo esta obra de arte diariamente. La experiencia de ambas familias sirve como otro recordatorio del mal y la brutalidad del régimen nazi”.