Un equipo de investigación dirigido por Talia Yashuv y Leore Grosman de la Universidad de Jerusalén identificaron pequeños objetos de piedra, datados en 12000 años de antigüedad, que parecen haber sido usados para hilar fibras en el valle del Jordán.
Los hallazgos se produjeron en el yacimiento de Nahal-Ein Gev II, a unos pocos kilómetros al sur del Mar de Galilea, un lugar que está asociado con el período Natufiense, una época de finales de la Edad de Piedra en la que los humanos se habían establecido en aldeas permanentes pero aún no habían desarrollado la agricultura ni domesticado animales.
Los que se descubrieron fueron pequeñas piezas de piedra caliza perforadas, usadas para ayudar a girar un huso y transformar fibras como lino o lana en hilo. El diseño circular permite un hilado más rápido y eficiente, y representa una forma temprana de la tecnología de rotación con rueda.
Este descubrimiento adelanta la fecha conocida del uso de esta tecnología por aproximadamente 4.000 años. Para confirmar la función de estos artefactos, los investigadores analizaron las piezas utilizando software especializado.