La revista Nature Ecology & Evolution publicó recientemente los resultados de un estudio llevado a cabo por un grupo de investigadores de la Universidad Hebrea de Jerusalén, que trabajaron sobre el ADN de cerebros humanos antiguos.
Los científicos israelíes lograron desarrollar una técnica genética revolucionaria que permite reconstruir los sistemas regulatorios del ADN de los cerebros humanos antiguos, incluso en ausencia de tejido cerebral conservado, lo que proporciona nuevas perspectivas sobre la evolución del cerebro humano y el desarrollo de sus capacidades avanzadas.
El equipo creó un algoritmo capaz de reconstruir el paisaje epigenético de cerebros antiguos, lo que permite realizar comparaciones entre humanos antiguos y modernos, arrojando luz sobre los cambios genéticos que se furon produciendo a través de millones de años, por ejemplo, el hecho de que se haya triplicado en tamaño.
Este método podría ampliarse para estudiar diferencias evolutivas en otros sistemas biológicos, como el corazón o la piel.