El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, habló por teléfono con el ministro de Exteriores de Arabia Saudita, el príncipe Faisal bin Farhan Al Saud, para abordar la prevención de una «escalada regional» y finalizar un «acuerdo de alto el fuego» entre Israel y el grupo terrorista islámico Hamás.
El jefe de la diplomacia estadounidense agradeció al príncipe Faisal el trabajo de Arabia Saudita para «facilitar el flujo de ayuda humanitaria a Gaza».
Hamás, que pretende recuperar el control de la Franja de Gaza y está enzarzado en una guerra con Israel, arguyó que el primer ministro, Benjamín Netanyahu, «sigue poniendo obstáculos para llegar a un acuerdo» de cese el fuego, tras rechazar la organización terrorista palestina los últimos avances de las negociaciones.
En la conversación se abordó también las preocupaciones generadas en EE.UU. por las acciones de los hutíes, incluido su reciente asalto a la oficina en Saná (Yemen) del alto comisionado de la ONU para los derechos humanos, dijo el Departamento de Estado de EE.UU. en un comunicado.
Le agradeció también el papel de Arabia Saudita como coanfitrión de las conversaciones en Suiza destinadas a implementar la Declaración de Yeda y lograr un cese de las hostilidades en Sudán.
Ese pacto, mediado por Arabia Saudita y Estados Unidos en mayo de 2023, contempla treguas humanitarias para permitir el acceso y el reparto seguro de asistencia vital para millones de sudaneses que se encuentran atrapados en zonas de conflicto, pero nunca se llegó a implementar del todo debido a los cruces de acusaciones entre las partes beligerantes.
El Gobierno sudanés anunció que enviará una delegación a El Cairo para abordar con Egipto y EE.UU. la implementación del acuerdo de Yeda.
Agencias colaboraron con este artículo de Aurora
Del asalto a las oficinas de la ONU en Yemén, por parte de los hutíes, debe ser responsabilizado Irán, pues los proxies no hacen nada si no se lo ordena Irán. Si continúan pasándole la mano suave a los ayatolás iraníes, no habrá paz en el MO.