El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, señaló que el alto el fuego en el Líbano “se mantiene”, ya que tanto Israel como el grupo terrorista chií Hezbollah lo “siguen queriendo”.
“El alto el fuego se mantiene y estamos utilizando el mecanismo que se estableció cuando surge alguna inquietud sobre cualquier presunto informe de violaciones”, señaló Blinken en una rueda de prensa posterior a la reunión de ministros de Exteriores de la OTAN celebrada en Bruselas.
El jefe de la diplomacia estadounidense consideró que la razón de que se mantenga es, “fundamentalmente, que ambas partes, es decir, Israel y Hezbollah a través del gobierno libanés, querían y siguen queriendo el alto el fuego”.
Blinken dijo, en este sentido, que cualquier alto el fuego, si se va a mantener, “necesita tener algo en vigor para verificar y tratar cualquier preocupación o acusación de violaciones”.
El alto el fuego en el Líbano es producto, dijo, “de una diplomacia intensa y sostenida para lograrlo”.
“Eso es lo importante sobre lo que fuimos capaces de establecer, trabajando con Francia. Tienes un mecanismo de supervisión. Si hay preocupaciones de que una parte o la otra está violando el alto el fuego, viene a nosotros y de una forma u otra, implicamos a las partes. Eso es exactamente lo que ha pasado”, expresó.
El Líbano continúa pendiente de la aplicación de la tregua entre las Fuerzas de Defensa de Israel y el grupo terrorista chií proiraní Hezbollah después de repetidas de violaciones del alto el fuego que han dejado varios muertos. EFE y Aurora
Blinken dice que el alto el fuego en el Líbano “se mantiene” y todos lo “siguen queriendo”
Antony Blinken Foto: Departamento de Estado de EE. UU. / Chuck Kennedy vía Flickr
Blinken, como toda la administración demócrata, vive dentro de un tupper y no tiene la menor idea de cómo funciona el medio oriente
Urge que el pueblo libanés tome las riendas de su país y neutralice a los que le han causado tanto daño: Hezbolá, Hamás, los ayatolás iraníes y los políticos corruptos que merecen que los desaparezcan. Mientras todos esos desalmados no sean echados por la borda por el pueblo libanés, seguirán sufriendo el mismo problema.