Así lo informó la Casa Blanca que, tras indicar en un principio que había sido retrasada, anunció finalmente que la reunión entre los dos líderes se pospuso para mañana.
Biden está siguiendo de cerca lo ocurrido en Kabul con sus asesores y con el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, y el titular de Defensa, Lloyd Austin.
Al menos 12 soldados de Estados Unidos murieron este jueves y 15 resultaron heridos en el doble atentado y ataque armado fuera del aeropuerto de Kabul, informó el jefe del Comando Central de EE.UU. (CENTCOM), general Kenneth McKenzie.
En una rueda de prensa en el Pentágono en la que intervino telemáticamente, el general dijo que se trató de un atentado suicida perpetrado por miembros del Estado Islámico.
Medios afganos y la ONG italiana Emergency, que tiene un hospital en Kabul, han informado que hay al menos 15 muertos y 60 heridos.
Una de las explosiones se produjo en una de las puertas del aeropuerto de Kabul, mientras que la otra fue «en o cerca» del Hotel Baron, próximo al aeródromo, donde miles de personas se encontraban aglomeradas intentando salir del país en los vuelos de evacuación internacionales antes de la fecha límite del 31 de agosto.
El Gobierno de EE.UU. había avisado en los últimos días de una posibilidad «muy real» de un ataque terrorista en las inmediaciones del aeródromo afgano.
Hasta el miércoles, EE.UU. había asegurado que iba a seguir con las evacuaciones hasta la fecha límite marcada el presidente Joe Biden, el 31 de agosto, y que priorizaría la salida de las tropas en el último par de días.
De acuerdo a los datos proporcionados por el Pentágono esta semana, en Afganistán quedan unos 5.400 soldados de EE.UU., cuya misión principal es la protección del aeropuerto de Kabul. EFE