Una curiosa imagen de nubes amarillas apareció en los últimos días al sur de Israel. Transportadas por el viento, millones de langostas cubrieron el sur de Israel, provenientes desde Jordania.
Según información oficial, las autoridades se encuentran monitoreando el asunto pero sin notar peligros. Las langostas son en su mayoría adultas, por lo que no consumen mucha comida. Además, la aridez del Néguev dificulta su reproducción.
A diferencia de lo que sucedió en Jordania o en el Líbano, en Israel no creen que las langostas puedan generar un daño muy grande. De todos modos, en varios kibbutzim se desplegaron sopladores destinados a alejar a estos insectos.