Un episodio de violencia contra un diputado israelí se vivió en Jerusalén. Meir Porush, del partido ultraortodoxo Judaísmo Unido de la Torá, sufrió un ataque mientras salía de su hogar.
Un hombre quiso cortarle la barba al político, que no sufrió heridas ni necesitó asistencia médica. El atacante estaba acompañado por otra persona, y ambos estaban vestidos como judíos ortodoxos.
Los delincuentes se acercaron en moto e increparon al parlamentario preguntándole si era Porush. En ese momento, el atancante quiso cortarle la barba.
Según los reportes, Porush logró ahuyentar al hombre, que se fugó junto a su cómplice. La policía comenzó un proceso de búsqueda para dar con los prófugos.
Voces de todo el arco político se solidarizaron con Porush y condenaron el hecho. El ex primer ministro, Benjamín Netanyahu, se comunicó con la víctima y pidió por el esclarecimiento del hecho.
Por su parte, el presidente del parlamento, Mickey Levy, publicó un comunicado en donde se reconocía «conmovido hasta la médula por el feo y violento ataque».
«Atacar a figuras públicas es un acto que es destructivo para la democracia, y así es como debe tratarse», dijo Levy, que también se comunicó con Porush.
No es la primera vez que Porush sufre ataques por sus posturas políticas. En 2018, como viceministro de Educación, fue increpado por ciudadanos ultraortodoxos por haber apoyado mayor participación de la comunidad haredí en el ejército.